La fundadora de la página y grupo de ayuda para mujeres con cáncer de mama XtiXmiXnosotras (Por Ti Por Mi Por Nosotras), Myrna Solano, explica que si la situación para el resto del país en materia de salud es complicada, para Monterrey lo es aún más, pues el gobierno decidió no adherirse al Instituto de Salud para el Bienestar.
“De repente nos quitan los fondos que antes nos daban para tratarnos porque Monterrey no se adhirió al Insabi, que es la institución que debería brindarlos, y por eso ahora nos remiten a hospitales estatales, pero en realidad nos están dejando a la deriva.
Myrna Solano revela que un tratamiento que tarda aproximadamente un año para un cáncer de mama que es detectado en tiempo y forma, tiene un costo aproximadamente de 400 mil pesos. Pero si te encuentras con un cáncer etapa 4, eso te puede costar sólo el medicamento, advierte.
De brazos cruzados
Frente a esta realidad, las mujeres que buscan una atención médica conforme lo establece la Ley, se han manifestado en frente del Palacio de Gobierno, con lo que consiguieron tener una junta con el secretario de Salud del estado, Manuel de la O Cavazos.
“Tuvimos el viernes pasado una reunión con el secretario de Salud estatal, el doctor Manuel de la O, y él nos dijo que no tienen fondos, que no hay dinero, que estos recursos que pedimos son federales y ya no nos los van a dar porque no los recibieron.
“Entonces lo que básicamente nos dijo fue que si nosotras queremos ir a pelear los fondos con el Gobierno federales pues está bien. Pero que ellos no pueden hacer nada”.
Para Myrna las autoridades no entienden que hay cientos de mujeres que están peleando por sus vidas y por su derecho a la salud.
“En este momento de las 180 mujeres que fuimos reubicadas del Hospital San José al Universitario o al Metropolitano, hay 20 chicas que necesitan y no han recibido su quimioterapia, radioterapia y sus medicamentos. Y hay 30 más que requieren de atención urgente.
“Yo sé que no es una situación local, lo estamos viendo en todo el país, es un tema de fondos federales, pero nos están pidiendo que esperemos las cirugías, los tratamientos, los medicamentos, las revisiones y el cáncer no espera”.
Compromiso contra el cáncer de mama inviable
La Fundación Cáncer de Mamá (Fucam) es una de las asociaciones que dependía de los fondos federales que brindaba el gobierno a través del Seguro Popular para poder otorgar una atención gratuita y de calidad a miles de mujeres de bajos recursos víctimas de este padecimiento.
Sin embargo, con la llegada del Insabi y con la cancelación del programa implementado por la administración anterior, hoy le es imposible continuar dando los servicios como lo hacía originalmente, lo que ha llevado a cientos de sus pacientes a denunciar la falta de atención gratuita.
“En la página de Fucam subieron un comunicado donde dijeron que en febrero lograron un acuerdo con Insabi. Y aseguraban que a las pacientes inscritas hasta el 2019 se les seguiría brindando el mismo servicio.
Fucam responde
Lilián Gómez, directora de comunicación de la Fundación Cáncer de Mama, explicó a Reporte Índigo que efectivamente en el mes de febrero se llegó al acuerdo con el Insabi que Adriana y muchas otras pacientes hoy acusan no se ha respetado, pero poder cumplirlo ha sido muy complicado.
“Sí, llegamos a ese acuerdo. Pero en realidad lo que sucedió fue que a partir de marzo nos cerraron la plataforma donde subíamos los casos que atendíamos anteriores al 2020 para que después nos pudieran reembolsar los gastos.
“Desde entonces, continuamos dando radioterapia y quimioterapia a las pacientes que así lo requieren de antes del 2020 porque ese es nuestro compromiso con ellas, sin embargo, con el resto no podemos continuar de la misma manera”.
Las pacientes de Fucam acusan que ante estos cambios, se les ha retirado sin avisarles el carnet que les garantizaba hasta hace unos meses la atención gratuita.
Por su parte, la directora de comunicación asegura que no es que se les esté quitando su carnet.
“No les estamos quitando el carnet como tal, las estamos recategorizando de acuerdo con un estudio socioeconómico. Fucam no puede en estos momentos con la carga económica, entonces estamos buscando cobrar cuotas muy económicas para que no dejen su tratamiento y se está dando seguimiento y se les atiende al menor costo posible.
“Nuestro principal objetivo sigue siendo ayudar a quienes menos recursos tienen. Pero para poder continuar con eso ahora necesitamos generar otros servicios para que entren ingresos y mantener cuotas bajas”, asegura.
Lilián Gómez dice que entiende la molestia de las pacientes ante esta situación porque estaban acostumbradas a recibirlo todo de manera gratuita, como debería de ser siempre para todos, pero Fucam ya no puede con la carga.
Por último, lamenta la postura del gobierno ante las instituciones como en la que ella labora, ya que en lugar de aliarse y saber que están apoyando al bienestar del país, parece que es lo contrario y los atacan y quitan recursos.