Partidos, ¿quién da más?

Mientras la sociedad civil sigue volcada en las calles dando muestras de solidaridad tras el sismo del pasado martes, los partidos políticos pelean el protagonismo por los recursos destinados a la reconstrucción.

Tanto el PRI, Morena o los integrantes del Frente Ciudadano buscan adjudicarse la iniciativa, que en realidad surgió de la ciudadanía, y en las calles y, sobre todo, en las zonas afectadas crece el rechazo contra todos los partidos y los señalamientos de querer sacar beneficio político de la desgracia.

Aunque en un principio tanto el INE como los partidos políticos ponían sobre la mesa argumentos legales que hablaban sobre la complejidad de destinar sus prerrogativas de manera directa para apoyar a los damnificados y financiar la reconstrucción, en solo unos cuantos días han pasado a pregonar que buscan el mecanismo más adecuado para apoyar en la tarea.

En este momento, a casi una semana del sismo de 7.1 grados que azotó la Ciudad de México y los estados de Puebla y Morelos, principalmente, hoy, los partidos parecen estar peleando -al menos en el discurso- para ver quién es el que se va a desprender de un mayor porcentaje de sus recursos para el proceso electoral 2018.

La presión ciudadana ha sido sin duda un factor clave para que tanto el INE como los partidos hayan abierto la puerta y estén -al menos en el papel- buscando la mejor alternativa para encauzar los recursos por la vía legal.

Desde los minutos posteriores al sismo, la petición #PartidosDenSuDinero se convirtió en tendencia en las redes sociales, que después se convertiría en una petición en la plataforma change.org que al día de hoy está cerca de sumar 2 millones de firmas.

Andrés Manuel López Obrador, dirigente nacional de Morena, fue el primero en abordar el tema, lo hizo tras el sismo del pasado 7 de septiembre asegurando que buscaría que el Consejo Nacional del partido le autorizara destinar el 20 por ciento de su presupuesto para los damnificados del terremotos.

Sin embargo, ha sido tras el sismo del pasado martes 19 cuando el tema de encauzar los más de 7 mil millones de pesos -aproximadamente- que tienen presupuestado los partidos para 2018, ha tomado fuerza.

En un momento en que la clase política en general pasa quizá por una de sus etapas más complicadas en cuanto a desprestigio y rechazo por parte de la ciudadanía y a las puertas de las elecciones federales de 2018, la sospechas sobre el oportunismo político dada la coyuntura se multiplican.

Si bien los actores políticos han hecho llamados para no politizar la tragedia, lo cierto es que la actuación de los partidos y el porcentaje que ‘cedan’ para la reconstrucción tras el sismo podría convertirse en uno de los temas de la campaña electoral y nadie quiere quedarse atrás.

En el cálculo político, quizá la imagen que puedan dejar en los próximos días les pueda resultar más redituable que el dispendio en el periodo de campañas. Por ello, por lo menos en el papel, nadie escatima nada.

Tras la presión

Luego de la petición #PartidosDenSuDinero los partidos anunciaron:

Se abren las apuestas

Nadie se quiere quedar detrás y conforme van pasando los días los partidos siguen aumentando -por lo menos en el discurso- el monto de que piensan devolver para apoyar la reconstrucción tras los sismos del 7 y 19 de septiembre, tal y como si fuera una subasta.

Hasta el momento, la ‘apuesta’ más fuerte es la del llamado Frente Ciudadano por México, integrado por los partidos PAN, PRD y Movimiento Ciudadano, cuyos dirigentes se manifestaron dispuestos a desprenderse del 100 por ciento de sus prerrogativas.

En un video donde aparecen los líderes de estos partidos, Ricardo Anaya, Alejandra Barrales y Dante Delgado, también pidieron un programa de austeridad gubernamental que acompañe esta medida que incluye entre otras cosas eliminar los gastos médicos particulares de los altos funcionarios públicos y se mostraron en contra de las campañas costosas en un país con tantas necesidades.

En respuesta, Andrés Manuel López Obrador apareció en un nuevo video asegurando que en Morena le tomaban la palabra al Frente y que sumarían a la iniciativa, y aplaudió que hayan copiado medidas que, a su parecer, él había planteado antes. El tabasqueño también insistió en que, como parte de las medidas de austeridad debería quitarse la pensión a los expresidentes del país.

El PRI, por su parte, anunció el pasado 21 de septiembre que renunciaba a más de 258 millones de pesos otorgados por el INE en apoyo a los damnificados y a la reconstrucción tras el sismo, el equivalente al 25 por ciento de su presupuesto para 2018.

El Partido Verde también anunció que renunciaba a 85 millones de pesos de su presupuesto para 2018.

Otros partidos también han manifestado su intención de ‘aportar’ parte de sus recursos de 2018 para las labores de reconstrucción.

Ahora la principal exigencia ciudadana es que lo que han planteado los partidos pase del discurso a la realidad, que sea a través de un procedimiento transparente y, sobre todo, que los recursos sí lleguen a donde tengan que llegar, que no quede todo en un caso de oportunismo político.