Paso hacia atrás en materia energética con reforma
Las modificaciones que la actual administración quiere llevar a cabo en el sector energético de México ponen en riesgo el bienestar del planeta y el cumplimiento de tratado internacionales a los que el país se ha comprometido
Ernesto SantillánLos cambios que busca realizar el Gobierno federal en materia energética en el país no sólo traen riesgos para el sector privado y los inversionistas, también amenazan con dañar el medio ambiente.
Valeria Vázquez, especialista en derecho administrativo, energético, regulatorio y público de Deloitte México, explica que las últimas subastas de energía eléctrica que organizó México nos colocaron en el primer lugar de Latinoamérica en cuanto a la capacidad instalada de energía eólica. Además, tuvimos el récord de obtener la electricidad más barata de todo el mundo.
No obstante asegura que “en este momento, aún de libre competencia para obtener energías más baratas y limpias, la iniciativa de reforma nos pone en una posición contraria al movimiento mundial que busca dejar atrás los combustibles contaminantes (fósiles)”.
Además, se violaría el Acuerdo de París, del cual forma parte México y que impone ciertas obligaciones a los países para apoyar la transición energética y combatir el cambio climático.
De igual manera, la experta de Deloitte explica en el análisis de la iniciativa que realizó que la iniciativa elimina la obligación de despachar primero la energía más barata y da prioridad, en el proceso, a las centrales generadoras de la CFE.
“En primer lugar a las hidroeléctricas; en segundo, a las demás centrales de la CFE; posteriormente, a la energía eólica y solar de los particulares; y, finalmente, a las centrales de ciclo combinado de particulares.
“Sin embargo, como las centrales hidroeléctricas no pueden satisfacer la demanda de electricidad del país, las principales beneficiadas serían las plantas más contaminantes de la Comisión Federal de Electricidad que encabeza Manuel Bartlett y las cuales generan energía eléctrica a partir de combustóleo y carbón y que tienen costos más altos que el resto, lo que tendría implicaciones económicas y ambientales negativas a nivel local y global”.