El presidente Enrique Peña Nieto defendió este lunes la construcción del Nuevo Aeropuerto Internacional de México (NAIM), pues dijo es una obra emblemática de orden transexenal que fue planteada en el mediano y largo plazo, debido al crecimiento actual de la aviación comercial.
Es una obra pensada “en el mayor número de usuarios que cada día se están registrando, y en consecuencia, creo que México demanda un aeropuerto moderno y con una visión de largo plazo”.
Aseguró que estará pendiente de la decisión que tome el próximo gobierno, pero consideró que “es una obra que trae una previsión no solo de atender la necesidad actual, sino necesidades futuras”.
Al subrayar que un país que no detona infraestructura se queda rezagado, Peña Nieto sostuvo que “más allá de otro paliativo que se pueda realizar, lo importante es generar esta infraestructura que permita que una sociedad pueda crecer”.
Las obras en el sector, añadió, permiten que “el comercio, los negocios, los servicios que llegan a cualquier parte de nuestra geografía sean más fáciles, más económicos. Los costos se reducen cuando hay infraestructura”.
Acompañado por el secretario de Comunicaciones y Transportes, Gerardo Ruiz Esparza, y los gobernadores de Michoacán, Silvano Aureoles Conejo, y de Jalisco, Aristóteles Sandoval, enfatizó que el nuevo aeropuerto se impulsó “como una gran obra de infraestructura”, pues la actual terminal aérea capitalina está rebasada en su capacidad.
Abundó que el Banco Mundial, la Comisión Económica para América Latina y el Caribe (Cepal) y la Organización de las Naciones Unidas (ONU) han señalado que “un país que invierte en infraestructura está invirtiendo en el desarrollo y progreso de una sociedad”.
El presidente Peña Nieto reiteró que el desarrollo de infraestructura ha sido un eje rector y prioridad de su gobierno, y que la inversión realizada en este rubro es de prácticamente el doble de la administración anterior.
“Me refiero a inversión pública y privada, porque sentamos bases para alentar la inversión privada, para que no todo dependa de la inversión pública, que el empresario encuentre condiciones para invertir”.
Detalló que la inversión en infraestructura durante la administración actual ha sido de 7.7 millones de millones de pesos, y que entre inversión pública y privada representa 7.4 por ciento respecto al Producto Interno Bruto (PIB) entre 2013 y 2018, mientras que en la administración anterior fue de 3.7 por ciento.
El Ejecutivo federal también destacó la construcción del Tren Interurbano México-Toluca, también una obra transexenal, la cual, dijo, podrá concluirse “con un empujón adicional que, espero, el próximo gobierno realice, y así lo ha comprometido el presidente electo, esta obra puede entrar en operación muy próximamente”.
Además, el tren eléctrico de Guadalajara, “otra obra emblemática” que en las próximas semanas entregará al gobierno de Jalisco, para iniciar la etapa de pruebas y que inicie a operar en los siguientes meses.
Peña Nieto aprovechó este evento para celebrar el Día del Caminero, que se conmemora el 16 de octubre, y felicitó a Víctor Ortiz, designado Caminero del Año 2018, y a Arturo Manuel Monforte, reconocido por su trayectoria como caminero.