Perspectiva de Género en pantalla grande

La Ciudad de México será la sede del Primer Encuentro de Mujeres en el Cine, un evento que permitirá expandir el diálogo, intercambiar experiencias y ampliar las redes de apoyo entre las integrantes de la industria del séptimo arte

Luchar contra el acoso y demostrar que el trabajo vale más que su género son algunas de las batallas que desde hace años han librado las mujeres en el ámbito del cine.

Para reconocer su participación y el rol que han desempeñado en la industria cinematográfica, del 11 al 15 de marzo se llevará a cabo en la Ciudad de México el Primer Encuentro de Mujeres en el Cine con Perspectiva de Género.

Un encuentro que además de contar con la participación de mujeres profesionales en el séptimo arte, tendrá actividades entre las que destacan clases magistrales, mesas de discusión con productoras, directoras y sonidistas, así como talleres prácticos.

Previo al evento, Reporte Índigo entrevistó a cuatro mujeres: Imelda, Sandra, Claudia y Eloisa; quienes no sólo comparten historias de éxito al abrirse camino dentro de una industria acaparada en su mayoría por hombres, sino que han sufrido el escarnio y menosprecio a su trabajo por su género.

“Este evento se hace con la finalidad de destacar la presencia y los logros de la mujer en el cine, vamos a hablar y a reconocer esta lucha de perseverancia que hemos llevado varias generaciones”, comenta Imelda González, organizadora del encuentro

Ella asegura que este encuentro, el cual se lleva a cabo a través de la escuela y productora de cine Altrafílmica, responde a una necesidad de organización y apoyo entre mujeres.

“No se trata de victimizarnos, sino de platicar sobre lo que se ha hecho para llegar a estar en el lugar que queremos estar, a pesar de subestimarnos o menospreciarnos por ser lo que somos: mujeres”, dice.

Asimismo, como parte de los esfuerzos de organización, Imelda descubrió algo que la dejó inquieta y sorprendida.

“Partimos de una convocatoria que une a varias generaciones, pero en el proceso nos dimos cuenta que al hablar de los problemas a los que nos enfrentamos, como el acoso, creíamos que el antes y el después serían diferentes. Y no, sigue existiendo este problema, afortunadamente lo que sí ha cambiado es la actitud, la decisión de enfrentarlo e incluso denunciarlo”.

El cine es resistencia

Para la cinefotógrafa Sandra De Silva, el enfocarse únicamente en su profesión no ha sido una tarea sencilla, ya que en la actualidad, el ser mujer en la industria fílmica sigue acarreando una serie de retos y complicaciones.

“En pleno 2019 las cosas no han cambiado para nosotras. Siendo mujeres, la mitad de nuestra energía la invertimos en luchar porque se valore nuestro trabajo y no se critique por el simple hecho de haber sido creado por una mujer”
Sandra De Silvacinefotógrafa

Sandra, fundadora de la organización civil Apertura, ha trabajado en cortometrajes y videos musicales, en áreas de producción y como primer asistente de fotografía. Afirma que desde su especialización, tanto ella como otras compañeras buscan dar a conocer el trabajo de las mujeres que están detrás de las cámaras. Asimismo, no olvida la primera vez que le negaron un trabajo por ser mujer.

“Una productora me dio entrevista y lo primero que me dijo al abrir la puerta fue ‘no sabía que eras mujer’. ¿Te imaginas? Una mujer discriminándote. Está de más decir que no me dieron la chamba, ni siquiera me dejó mostrarle las cosas que había hecho”, recuerda.

Pero no se dio por vencida y comprobó que cuando se cierra una puerta se abre una ventana: “el primer día de rodaje se acercaron unos compañeros y me dijeron que el productor no había estado muy seguro de darme el trabajo porque soy mujer, entonces me recomendaron que cada vez que él volteara a verme cargara lo más pesado para que me respetara y sí lo hice. Sólo así me quedé”.

Aunque reconoce que entrar a la cinefotografía es difícil para las mujeres, ya que se considera un trabajo de hombres por ser altamente técnico, desde su trinchera no se ha cansado de buscar una igualdad en la que se respete la labor por lo que es y no por el género de quien lo hace

Sandra ya no es la misma que rompió en llanto cuando le negaron un trabajo por ser mujer, ahora es miembro del International Collective of Female Cinematographers y ha trabajado en Canadá, Londres, Irlanda y Suiza

“El cine es resistencia, por eso es importante hacer encuentros así y que se hable de la reprimenda que tenemos las mujeres, no sólo en la sociedad sino también en el ámbito profesional”

Rompiendo esquemas

“A mí me ha tocado acoso sobre todo con los productores. Creen que por pagarte un trabajo los tienes que obedecer en todo. Una vez iba llegando al set y un productor me dijo ‘ven, dame un beso’, me lo dijo como una orden. No lo besé por el simple hecho de que no quería hacerlo, me hizo sentir muy incómoda desde su posición de poder, pero desde ahí supe que no por ser mujer me tengo que doblegar. Yo aquí estoy para no ceder”, narra Claudia Garibaldi.

Ella, quien a lo largo de su carrera como guionista ha logrado adquirir habilidades como asistente de dirección y gerente de producción, observa que si bien, entre colegas guionistas no hay diferencias, donde sí las hay es entre los productores o directores.

“Dicen cosas como ‘ella mejor que haga los diálogos porque tiene más sensibilidad’, cuando en realidad el escritor no tiene mayor sensibilidad por su género”.

Apasionada de la escritura dramática, Claudia cuenta: “no se trata de que nos traten como objetos. Por eso creo en este tipo de encuentros, porque siento que desde aquí podemos ayudar a desmentir que el feminismo es una guerra contra alguien. Más bien es una lucha en la que tenemos que ir unidas y tenemos que desmentir el mito de que las mujeres somos rivales, no tenemos que ser enemigas unas de las otras. Al contrario, entre nosotras hay que fortalecernos hoy más que nunca”.

Por su parte, la directora Eloisa Diez, miembro de Sandía Digital, explica que en su organización se reúnen mujeres con experiencia en producción audiovisual y cine que unen esfuerzos en la denuncia de fenómenos recurrentes en la industria como el mansplaining, ya que muchos trabajadores del sector de entrada asumen que una mujer no es capaz e intentan explicar los conceptos básicos del trabajo.

“En esta colectiva somos puras mujeres. Acá trabajamos para fortalecer los derechos humanos y creemos que lo audiovisual puede ser una herramienta para transformar la realidad. Es difícil a veces entender las violencias que vivimos si no las nombramos: escuchar a mis compañeras y saber que un productor quiso besarlas contra su voluntad. Tenemos que decirlo así: es una manera de violentarnos”

A pesar de la realidad que se vive en estos espacios, Eloisa tiene esperanza, pues siente que seguirán existiendo avances gracias a las nuevas generaciones de mujeres que entran al mundo del séptimo arte.

“De pronto encuentras a chavas en las áreas que siempre se les negaron, como en sonido. Es muy gratificante ver cómo se van abriendo puertas, van rompiendo esquemas”.

El encuentro se llevará a cabo en la sede de Altrafílmica, dentro de los Estudios Churubusco en la alcaldía de Coyoacán.