Trump: la tormenta perfecta
La campaña de Donald Trump ha sido disruptiva en todos los sentidos. La reacción del mercado ante la victoria electoral del candidato republicano no podía ser la excepción.
Indigo Staff
La campaña de Donald Trump ha sido disruptiva en todos los sentidos. La reacción del mercado ante la victoria electoral del candidato republicano no podía ser la excepción.
En la noche del 8 de noviembre, conforme la tendencia electoral comenzó a favorecer a Trump, los principales indicadores accionarios y divisas emergentes presentaron caídas exacerbadas.
La victoria de Trump no sólo puso a prueba a los mercados financieros en México y en el mundo, sino que incluso orilló a un recorte de la perspectiva de expansión del producto interno bruto (PIB) del país.
Los estrategas de CitiBanamex revisaron a la baja el pronóstico de crecimiento de México para 2017 a 1.8 por ciento, desde el anterior 2.3 por ciento. El cambio de expectativa obedeció a la materialización de uno de los escenarios de riesgo que plantearon los analistas del banco: la improbable victoria electoral del candidato republicano a la presidencia de Estados Unidos.
Las consecuencias adversas de este escenario evocaron las declaraciones que realizó el gobernador del Banco de México, Agustín Carstens, a finales del mes de septiembre cuando comparó el triunfo de Trump con un huracán grado cinco para la economía mexicana.
SIn embargo, pese al tono apocalíptico expresado por una de las autoridades económicas más relevantes en México, Citibanamex considera que aún hay espacio para tomar acciones de política económica que contengan este riesgo. Entre las medidas que se encuentran dentro del marco de posibilidades de la Secretaría de Hacienda y del Banco de México están la activación de líneas de instrumentos swap con la Reserva Federal, el uso o ampliación de la línea de crédito flexible que mantiene el país con el Fondo Monetario Internacional (FMI), asó como intervenciones de la Comisión de Cambios..
En ese sentido, el banco refirió que la primera medida significaría la acción más viable en esta coyuntura, dado que podría proveer de liquidez al mercado de renta fija, emulando el programa implementado durante la crisis global de 2008.
“Para nosotros, tal opción es razonable, dado que ayuda a enfrentar importantes retos de estabilidad financiera, que ahora pasan a primer plano”, afirmaron analistas de CitiBanamex.
En ese sentido, se comparó la situación actual con otros choques recientes como los efecto derivados de la salida de Reino Unido de la Unión Europea (Brexit). La diferencia reside en que, ahora, existe un mayor riesgo de caer en recesión.
Por otra parte, los analistas de Citibanamex mencionaron que el Tratado de Libre Comercio de América del Norte (TLCAN) será “el elefante en el cuarto” de la relación bilateral. Al respecto, agregaron que el gobierno mexicano podría evaluar alternativas como la transformación del TLCAN en una unión aduanal con un mayor control migratorio en la frontera sur de México, de modo que el país permanezca dentro y no fuera de una Norteamérica que, eventualmente, será más proteccionsita.
Margen de maniobra
Este argumento fue suscrito por el director del Instituto para el Desarrollo Industrial y el Crecimiento Económico (IDIC), José Luis de la Cruz Gallegos, quien sostuvo que existe la necesidad de replantear la estrategia de política económica. Señaló que una propuesta latente es la de apoyar el contenido nacional mediante un programa de expansión del gasto público.
En ese sentido, de la Cruz aseguró que sí existe margen de maniobra siempre que se elabore una estrategia de política económica propositiva, donde se recupere la interacción con el sector privado mexicano y se genere un gasto público eficaz, orientado a elevar la competitividad.
“Parte de ello se logra aumentando el contenido nacional de las compras de gobierno, de poco sirve tener un presupuesto que alcanza 4.9 billones de pesos, si su ejercicio termina favoreciendo las importaciones”, precisó.
Agregó que México terminó pagando la factura por haber subestimado el triunfo del republicano.
Durante la sesión de ayer, el súper dólar regresó, y la paridad cerró en 20.20 pesos por dólar en ventanillas bancarias.
Finalmente, el director del IDIC dijo que la lección de la jornada electoral de Estados Unidos es que México debía tener un plan de contingencia sólido para no improvisar, dada la magnitud de la interrelación y dependencia que representa la relación con Estados Unidos.
Riesgos al crecimiento
A pesar de la volatilidad, la calificadora Fitch Ratings reafirmó la calificación crediticia de la deuda soberana de México en BBB+, con perspectiva estable.
La agencia calificadora dijo que la campaña electoral ocasionó volatilidad en el peso, la cual se prevé que continuará. La divisa mexicana se depreció ayer y es posibilidad que haya un debilitamiento mayor.
Por su parte, México ha abordado el impacto potencial del mercado financiero, ya que el Banco de México incrementó durante el presente año las tasas de referencia en 150 puntos base, lo cual incluye el alza de 50 puntos base en septiembre.
También se aumentó la línea de crédito flexible a dos años con el FMI, en alrededor de 21 mil millones de dólares, a un total de 88 mil millones de dólares. La medida provee una protección contra salidas desordenas de capital y volatilidad de mercado severa.
Fitch Ratings añadió que como apoyo a la confianza del inversionista, el gobierno mexicano está apuntando a un superávit primario del sector público de 0.4 por ciento del PIB para el siguiente año, que sería el primero desde 2008.
En julio pasado, la agencia financiera afirmó la calificación de México en BBB+; con perspectiva estable, cuando también advirtió que el deterioro de los vínculos económicos, comerciales y financieros con Estados Unidos presionaría el perfil crediticio soberano de México.
“Fitch monitoreará la evolución de estos riesgos, la efectividad de las políticas con las que las autoridades respondan, y las implicaciones para el crecimiento de México”, destacó.
También evaluará el efecto sobre las finanzas públicas, y trayectoria de deuda, y las cuentas externas.
Por último refirió que un crecimiento débil y un deterioro en la dinámica de deuda pública serían negativos para las calificaciones de México.
A su vez, Moody´s advirtió que habría una desaceleración en las remesas que envían mexicanos al país, al calificar el resultado electoral “bastante negativo”, para México, de acuerdo a Reuters.
Lo anterior porque las propuestas proteccionistas de Trump afectará la actividad manufacturera, que es vital para países de la región.
Jaime Reusche, Vicepresidente y analista senior de la agencia calificadora declaró a Reuters que no planea cambiar las calificaciones crediticias o perspectivas sobre los soberanos latinoamericanos, luego de la sorpresiva victoria de Trump, en la elección presidencial de Estados Unidos.
Se abre nuevo capítulo con EU.- EPN
Tras la victoria de Donald Trump, el presidente Enrique Peña Nieto y los titulares de la Secretaría de Hacienda, El Banco de México y la Secretaría de Relaciones Exteriores enviaron mensajes de estabilidad, y destacaron el inicio de una nueva era en la relación bilateral.
El mandatario mexicano emitió ayer un breve mensaje ante representantes de los medios de comunicación en la residencia oficial de Los Pinos, y señaló que ya había conversado con Donald Trump para expresarle su felicitación.
“Fue una conversación cordial, amable y respetuosa. Ambos coincidimos en que debemos de trabajar por una relación de confianza, de futuro compartido, porque nuestros países son muy importantes el uno para el otro”.
Peña acordó con el presidente electo de los Estados Unidos la celebración de reuniones entre sus equipos de trabajo, para comenzar a delinear una agenda que incorpore los temas de interés común, como la seguridad y la cooperación.
“Acordé reunirnos durante el periodo de transición, para definir con toda claridad el rumbo que tendrá que tomar la relación entre ambos países”, dijo.
Peña Nieto recalcó que tras la culminación del proceso electoral en los EU se abre un nuevo capítulo en la relación de México con ese país, lo cual implicará un cambio, pero también, una gran oportunidad.
“El gobierno buscará en esta nueva etapa de relación bilateral, oportunidades que beneficien a ambas sociedades. Lo haremos con ánimo constructivo a partir de nuestras fortalezas como nación y con base en el respeto mutuo de nuestras soberanías”.
Finanzas sólidas y estabilidad
Durante un mensaje la mañana de ayer, José Antonio Meade, secretario de Hacienda, aseguró que, ante el resultado de las elecciones en Estados Unidos, México está en una posición de fortaleza para enfrentar el nuevo entorno.
“El resultado de la elección no implica un impacto inmediato en el marco normativo que regula el comercio de bienes y servicios, flujos financieros o la capacidad de las personas para viajar entre ambos países.
“Nuestro país goza de estabilidad macroeconómica que se ha logrado a través de muchos años de la aplicación de políticas fiscal y monetaria responsables, prudentes y oportunas, de un sistema financiero bien capitalizado, solvente y sin problemas de liquidez”.
El funcionario afirmó que las autoridades estarán vigilantes a la evolución del entorno financiero, para tomar las medidas necesarias en materia fiscal, monetaria, financiera y comercial, con el objetivo de mantener la senda de crecimiento y la estabilidad financiera.
“México ha vivido en el pasado retos de volatilidad que hemos enfrentado en unidad, aprovechando nuestra solidez económica y tomando decisiones correctas y prudentes de política. Y ésta no habrá de ser la excepción”, dijo José Antonio Meade.
Trasciende la elección
Por su parte, la Secretaría de Relaciones Exteriores, Claudia Ruiz Massieu, aseguró en entrevista en el noticiero matutino con Carlos Loret de Mola, que la relación entre México y Estados Unidos no comienza ni termina con el reciente proceso electoral.
“Es una relación estratégica y cotidiana. No empezamos de cero, esta es una relación que tiene un andamiaje institucional, jurídico, muy amplio, muy sólido, partimos de una base sólida”.
La canciller reconoció el proceso electoral que vivió la Unión Americana, y señaló que los siguientes meses de transición de un gobierno a otro traerán consigo una oportunidad de revisar los términos de la relación bilateral.
“Trabajaremos en conjunto, buscaremos puntos de coincidencia. Los términos de la relación cambian, hay un presidente electo, habrá un equipo de transición, habrá un nuevo gobierno. México planteará los términos de la agenda bilateral que nos interesan”.
Aseguró que en la agenda del gobierno mexicano está el fijar de manera clara los términos de la relación, la cual debe estar basada en el respeto mutuo.
“Tenemos tres meses para construir estos términos de referencia de la relación, esta nueva oportunidad con el gobierno de los Estados Unidos, planteando lo que nos preocupa, la protección de nuestra gente, que nuestra gente esté bien, se sienta segura y acompañada”.