‘Picachos no contamina’
La evidencia del daño ambiental que mostraron los habitantes del San Lorenzo que el sábado pasado iniciaron un plantón en el camino que conduce a los vertederos de Picachos, propiedad del Ayuntamiento de Zapopan y de Hasars, parecen no ser relevantes para la autoridad municipal.
Representantes del Municipio alegan que su vertedero no contamina la zona y en todo caso el desgaste ambiental de los pueblos de la barranca representa una “erosión natural” que en nada afecta a la salud, economía y calidad de vida de los habitantes de esa zona del municipio.
Paloma Robleshttps://www.youtube.com/watch?v=L_EB6oU52tQ
La evidencia del daño ambiental que mostraron los habitantes del San Lorenzo que el sábado pasado iniciaron un plantón en el camino que conduce a los vertederos de Picachos, propiedad del Ayuntamiento de Zapopan y de Hasars, parecen no ser relevantes para la autoridad municipal.
Representantes del Municipio alegan que su vertedero no contamina la zona y en todo caso el desgaste ambiental de los pueblos de la barranca representa una “erosión natural” que en nada afecta a la salud, economía y calidad de vida de los habitantes de esa zona del municipio.
“Puede haber agua sucia pero que no necesariamente es agua contaminada”, comentó en entrevista con Reporte Indigo, Elías Rangel Ochoa, secretario General del Ayuntamiento, quien aseguró, aunque sin mostrar ningún documento técnico, que tiene “plena certeza” de que el agua que fluye del vertedero de Picachos no contamina la zona.
“Toda el agua que sale del vertedero de Picachos está tratada y no está contaminada (…) incluso hubo un tiempo en el que se hizo un experimento en el que se llevó ganado y jamás le pasó nada”.
El funcionario, encargado de llevar las negociaciones con los manifestantes, desestimó el movimiento de los pobladores de la barranca al que criticó de poco organizado e incluso atribuyó intervenciones de terceros que nada tenían que ver en la zona.
El secretario General insistió que hasta ayer a mediodía el Municipio no había recibido un pliego petitorio claro en el que se establecieran cuáles eran las nuevas demandas de la población.
Y aseguró que el Municipio de Zapopan sí ha cumplido con todas las demandas a las que se comprometió en el 2009, y que en todo caso el conflicto reciente se debe a una desatención en la zona del “tema social”.
Rangel Ochoa reconoció que sí quedaron pendientes obras de infraestracutura social, como un centro de salud que había sido integrado en el acuerdo entre las partes y que no pudo ser cumplido porque la Secretaría de Salud Jalisco se negó dar el servicio.
“Lo que más queremos es asegurarles a ellos que la calidad ambiental está garantizada y que no tienen afectaciones en sus parcelas y que no tienen afectaciones en el medio ambiente”, apuntó Rangel Ochoa.
Sin transparencia
Desde el 2010 el Municipio de Zapopan ha gastado una suma millonaria para convertir el basurero de Picachos en un relleno sanitario con menos impacto ambiental, pero con altos costos.
Reporte Indigo dio cuenta de cómo durante la administración de Héctor Vielma (2009-2012) se pagó la construcción de la planta de tratamiento a sobreprecio.
Zapopan pagó más de 18 millones de pesos a una empresa que tenía poco de crearse por un proyecto idéntico que había sido ofrecido al Municipio a mitad de precio (véase, El Agua sucia de Vielma).
El Municipio también pagó 22 millones de pesos para la construcción de la celda número cuatro del relleno, misma que según los pobladores y especialistas que realizaron una gira este fin de semana en el vertedero constataron que todavía no tiene todo el recubrimiento necesario para evitar derrames e infiltraciones al subsuelo.
Aunque en dichos del secretario General todo en Picachos está cubierto y se tiene toda la documentación que avala que su vertedero no contamina y que toda el agua que sale de la planta está limpia.
Cuestionado sobre los malos manejos económicos en el vertedero y la poca transparencia con la que el Municipio se desempeña en el tema de los residuos, que no solo abarca a Picachos sino a toda la cadena alrededor de la recolección de basura, se comprometió a abrir al escrutinio público los documentos sobre las inversiones y operaciones en Picachos.
Además desmarcó a la administración de Héctor Robles de la de su antecesor , Héctor Vielma, y aseguró que desde que inició este gobierno se dedicaron a resolver los pendientes que quedaron rezagados y hoy en día el Municipio gasta 5 millones de pesos en la operación de la planta de tratamiento.
Insistió en que se debe conformar una mesa de diálogo no solo con los pobladores sino con autoridades ambientales, especialistas y académicos, y que se evalúe la situación actual del vertedero y los supuestos daños en la zona.
Policía de Zapopan desaloja a la fuerza
Pese a que el secretario General del Ayuntamiento de Zapopan, Elías Rangel Ochoa, insistió en entrevista que el plantón que mantenían los pobladores de los pueblos de la barranca no fue desalojado por la policía y que el enfrentamiento se había dado entre pepenadores y manifestantes, la versión de los manifestantes es otra.
En un comunicado enviado a pocos minutos de ocurrido el desalojo, los pobladores de San Lorenzo, Huaxtla, Milpillas, La Soledad e Ixcatán manifestaron que fue la policía quien realizó el operativo; informaron que alrededor de 40 elementos de la Policía de Zapopan intervineron.
“El desalojo ocurrió pasado el mediodía de este martes 11 de febrero, cuando llegaron cerca de 40 policías zapopanos en ocho patrullas y de manera rápida y violenta desalojaron por la fuerza a unos 25 pobladores de San Lorenzo, Huaxtla, Milpillas, La Soledad e Ixcatán que mantenían bloqueado el camino de ingreso a los basureros”, se lee en el documento enviado a la prensa.
Los manifestantes indicaron que los policías eliminaron el video que uno de los manifestantes había grabado en donde se consignaba el desalojo forzoso.
“Todo esto ocurría mientras el presidente municipal de Zapopan hacía declaraciones a los reporteros de la fuente, donde ofrecía diálogo a estos habitantes de los pueblos de la barranca del río Santiago que han demandado desde hace años el cierre de los basureros de Picachos y Hasars”, apuntan los manifestantes.
Los vecinos desalojados indicaron que el encuentro con los pepenadores se dio cerca de las nueve de la mañana y no refieren que se haya dado algún conflicto violento entre ambos grupos, aunque señalaron que los casi 200 pepenadores que arribaron al plantón mantuvieron una “actitud amenazante”.
Hasta ayer la recolección de basura se mantuvo normal en el municipio, aunque con retrasos.
Desde el domingo por la mañana la basura de Zapopan fue depositada en el vertedero Los Laureles a cargo de la empresa privada Caabsa en colaboración con el Municipio de Guadalajara.
Rangel Ochoa no quiso revelar el costo que implicará llevar a un vertedero ajeno las más de mil 400 toneladas de basura que se juntan a diario en Zapopan.
La estrategia se mantendrá en tanto no se resuelva el conflicto con los pobladores, aseguró el funcionario, aunque dijo que era probable que tras la apertura del camino a los vertederos el Municipio pudiera llevar al menos el 50 por ciento de los residuos a Picachos y el otro 50 a Los Laureles.
Por lo cual negó que en este momento se dé un cierre total del vertedero, pues ni siquiera se tienen contempladas otras opciones de largo plazo para colocar los residuos de Zapopan.
Aunque no descartó que el servicio de recolección de basura –que hoy opera exclusivamente el Municipio- pueda ser cedido a una empresa privada.