Es un pecado contra Dios ofender a la mujeres, no reconocer sus derechos, despreciarlas, no escuchar su palabra o tomar en cuenta su opinión, advirtió el obispo de San Cristóbal de las Casas, Felipe Arizmendi Esquivel.
“Es un abuso cualquier injusticia contra ellas, hemos saber reconocer nuestras faltas y saber pedirles perdón. Este día es una ocasión para revisarnos todos y darle a las mujeres el lugar que Dios quiere para ellas en la familia, en la sociedad y en la Iglesia”, planteó.
En ocasión del Día Internacional de la Mujer que se conmemoró ayer, indicó que, en el plan de Dios, la mujer tiene un papel muy importante, pues es igual que el hombre en cuanto a dignidad y derechos.
En un audio mensaje difundido por la Conferencia del Episcopado Mexicano (CEM) en su página web cem.org.mx, el prelado felicitó a la mujeres y envió su bendición.
“Que la virgen María, modelo perfecto de toda mujer, les inspires a ser fieles a su identidad y misión para que sean una manifestación de Dios que es amor. Muchas felicidades”, finalizó. (Notimex).
