Desde inicios de 2017, en Sonora surgieron grupos delincuenciales que atacan y amenazan a sus víctimas con machetes; la orden a los policías de la entidad fue disparar en defensa propia. Hoy, los diputados van contra esa medida.
En un punto de acuerdo, los diputados federales Sergio Cancino, Concepción Villa y Guadalupe Hernández, de la bancada de Morena, piden al gobierno de la priista Claudia Pavlovich dar marcha atrás en la orden de disparar contra estos jóvenes, pues consideran que se están cometiendo abusos, pues varios de ellos han sido abatidos.
El grupo delictivo de los “macheteros” surgió el año pasado en la ciudad de Hermosillo. Amenazan con machetes y armas blancas a las personas que pretenden asaltar. Han consumado delitos en calles, transporte público o comercios.
Uno de los casos que desbordó el hartazgo social, comentan los legisladores, fue el ataque a Martín, un enfermero que trabajaba en un hospital público de Hermosillo. El 3 de mayo de 2017 fue herido con un machete por un grupo de adolescentes que los asaltaron al salir de una tienda de autoservicio.
Martín denunció el hecho y acusó que los policías ni siquiera buscaron a sus agresores. Días después, Martín fue asesinado a machetazos cerca de su casa.
El Gobierno estatal respondió fuerte contra los “macheteros”. “Se les ordenó a los policías de ‘disparar contra presuntos delincuentes armados con esta arma blanca’, el 29 de mayo del 2017”, relatan los diputados.
La medida, apuntan, fue tomada por el fiscal del estado, Rodolfo Montes de Oca.
“Deben de saber que están portando armas prohibidas, que estén circulando por las vías públicas y que si son inspeccionados por nuestros elementos, al más mínimo amago (cuando) desenfunden esas armas nuestros elementos van a reaccionar con sus armas de cargo en legítima defensa, y lo más probable que va a suceder es que van a ser abatidos”, citan los congresistas a Montes de Oca, en una declaración dada a la prensa.
En menos de 15 días, dicen los legisladores, cuatro hombres que portaban machetes fueron asesinados. La Fiscalía justificó el asunto diciendo que en todos los casos se les quiso detener, pero opusieron resistencia.
Tan solo en mayo de 2017, un total de seis de estos “macheteros” fueron abatidos por policías de Sonora.
En 2018, los disparos contra estos personajes han seguido ocurriendo; en enero, se ultimó a tres personas que portaban machetes o cuchillos de gran tamaño. En todos los casos, la versión oficial es que se les intentó detener, pero atacaron a los policías.
“Lo cierto es que no hay justificación alguna, para estos asesinatos. Lo real es que los cuerpos policiacos están ejecutando a presuntos delincuentes. Si la delincuencia ha superado a la policía, que la policía se capacite, que mejore en su trabajo, que aprenda técnicas de sometimiento o utilicen en sus detenciones armas no letales.
“La gobernadora y el fiscal se han aprovechado del hartazgo social para permitir una escalada de reconocimiento de la violencia y muerte como solución a la inseguridad”, acusan los diputados.
Por ello, los congresistas piden a la gobernadora Claudia Pavlovich que ordene a las fuerzas policiales del estado que se abstengan de usar la fuerza letal contra estas personas; además, que se trabaje en un protocolo sobre el uso de la fuerza para que se apegue a los estándares oficiales.
