El próximo 1 de octubre las plataformas de hospedaje que operan en México comenzarán a tener impuestos a los arrendatarios.
Los anfitriones de servicios como Airbnb que reporten 5 mil 500 pesos de ingreso mensual pagarán el 2 por ciento del impuesto, esta tasa subirá a 3 por ciento si la ganancia asciende a 15 mil pesos mensuales.
En octubre de 2019, el Congreso de la Unión aprobó las tasas de retenciones del Impuesto Sobre la Renta (ISR) para quienes ofertan aojamiento particular y turístico a través de internet.
Según la tabla autorizada por diputados y senadores, los arrendatarios que ofrecen hospedaje temporal en plataformas electrónicas deberán pagar impuestos según los ingresos que obtengan de esta actividad.
La tasa del impuesto se incrementa a 5 por ciento para los anfitriones cuyos ingresos ascienden hasta 35 mil pesos.
Si se superan los 35 mil pesos en ganancias, la retención será del 10 por ciento.
La aplicación de alojamiento más popular, Airbnb, se dio de alta ante el Servicio de Administración Tributaria (SAT) a principios de septiembre de 2020 como prestadora de servicios digitales, con domicilio fiscal en Irlanda.
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En julio, la empresa comenzó a cumplir con las nuevas disposiciones fiscales, cobrando IVA en los arrendamientos y dando parte de ello al SAT.
En 2019, Airbnb entregó un monto de 203 millones de pesos por concepto del impuesto al hospedaje, a nombre de la comunidad de arrendatarios.
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— Airbnb Mexico (@airbnb_mx) September 17, 2020