El año 2012 ha sido el más mortífero hasta ahora para los comunicadores, según el balance anual de Reporteros sin Fronteras. El número de periodistas asesinados en ejercicio de su profesión se incrementó 33 por ciento respecto a 2011.
Y aunque el continente americano experimentó una baja relativa (15 muertos), México aparece dentro de los cinco países más mortíferos junto a Siria, Somalia, Paquistán y Brasil.
“La violencia –exponencial en seis años de ofensiva federal contra los cárteles– se cierne sobre los periodistas que se atreven a tratar temas relacionados con el narcotráfico, la corrupción, la infiltración de la mafia entre las autoridades locales o federales”, dice el reporte sobre las razones que han llevado al país a ocupar ese lugar.
Según el Barómetro de la Libertad de Prensa de la misma organización, en lo que va de 2013, 174 periodistas han sido encarcelados en el mundo, mientras que 19 han sido asesinados.
Los recientes atentados contra medios de comunicación (sobre todo en el norte del país) ya han hecho que México colabore con esos números, y no precisamente con los encarcelados, pues según la vicepresidenta de Reporteros Sin Fronteras Macu de la Cruz, en México “no encarcelan a los periodistas, los matan”.