Prevén reestructura de La Unión
Tras la caída de ‘Pancho Cayagua’, fundador del cártel ligado al multihomicidio del Bar Heaven, las autoridades capitalinas ubican a Roberto Fabián Miranda, ‘El Betito’, como probable heredero del control, por lo que no descartan pugnas internas
Icela LagunasA Francisco Javier Hernández Gómez, alias “Pancho Cayagua”, líder fundador de La Unión de Tepito emboscado y asesinado en una plaza comercial de Gustavo A. Madero, le sobrevive su hermano Armando, alias “El Ostión”, quien presumen podría encabezar la venganza que desate una nueva oleada de crímenes en la capital.
Durante el sepelio del capo de Tepito en el Panteón Dolores, policías de la Secretaría de Seguridad vigilaron y revisaron pertenencias a algunos de los asistentes a fin de evitar que introdujeran armas.
No hubo tumultos que lanzaran porras, como ocurrió recientemente con el abatido líder “El Ojos”, del Cártel de Tláhuac; mas bien familiares que miraban con recelo a su alrededor.
A ambos hermanos, “Pancho Cayagua” y “El Ostión”, se les adjudicaba, junto con “El Betito”, otro sicario del barrio, el control de venta de drogas fundamentalmente en las delegaciones Cuauhtémoc y Venustiano Carranza y los tianguis más importantes que se instalan en estas demarcaciones, a cuyos vendedores les cobran una cuota por garantizar su “seguridad”.
Tras el crimen de “Pancho Cayagua”, las autoridades policiacas de la Procuraduría General de Justicia señalan como el posible sucesor a Roberto Fabián Miranda, alias “El Betito”, un delincuente al que se le adjudican múltiples ejecuciones en el barrio y fuera de éste.
El nombre de “El Betito” suena también como el autor intelectual del crimen de “Pancho Cayagua”. Debido a lo anterior, las autoridades policiacas de la capital se mantienen a la expectativa de posibles venganzas entre grupos antagónicos.
“El Ostión”, hermano de “Pancho Cayagua”, cobró nombre cuando se le vinculó con el escandaloso multihomicidio de 13 jóvenes, en su mayoría oriundos del barrio de Tepito, que fueron secuestrados y después asesinados como parte del enfrentamiento entre bandas dedicadas a la venta de drogas en after, discotecas y bares de la ciudad.
La fama de ‘El Ostión’
Ambos hermanos echaron fama en el barrio de Tepito, primero como comerciantes de zapatos y ropa.
Luego como cabecillas de las organización que vendía fundamentalmente cocaína y cobraba derechos de piso a otros vendedores para no ser molestados en su trabajo.
Luego de su detención por su presunta participación en el crimen de los jóvenes secuestrados en el After Heaven, Armando “El Ostión” intentó desmarcar a su hermano “Pancho Cayagua” del caso.
En su declaración previa efectuada ante el Ministerio Público local de la Procuraduría General, “El Ostión” precisó que Francisco o alias “Pancho Cayagua” vivía, en ese entonces, en el estado de Sonora; mientras que el resto de sus hermanos, Julio César, María Magdalena y Víctor Hugo continuaban con la venta de zapatos y ropa en el barrio.
Desde ese año, 2013, “El Ostión” reconoció que por su propia cuenta y con el apoyo de algunos sobrinos se había dado a la tarea de realizar una investigación para encontrar a los responsables de la balacera y asesinato de cuatro personas al interior de un gimnasio en la colonia Morelos, delegación Venustiano Carranza, del cual lo responsabilizaban a él y a su hermano “Pancho Cayagua”.
A través de uno de sus contactos en la calle de Panaderos, a quien sólo refirió conocer como el “Chucky, supo que tres sicarios del barrio apodados “El Azael”; Guillermo, alias “El Muletas”, y Jaime, alias “El Soldado”, fueron quienes ingresaron al gimnasio encapuchados y efectuaron el asesinato de cuatro personas.
“El declarante andaba investigando quiénes habían sido los responsables de estos hechos ya que se había publicado en los periódicos que él y su hermano, de nombre Francisco Javier Hernández, de apodo ‘Pancho Cayagua’, habían sido los responsables de los homicidios del gimnasio”, detalla la declaración.
Debido a que los acusaban de este multihomicidio, “El Ostión” decidió buscar y pedir apoyo a un expolicía de la Procuraduría General de la República (PGR), de nombre Óscar Fabila, quien era su ahijado en la santería.
A este presunto expolicía le pidió que le ayudara a sacarlo del problema ya que él no era responsable de estos hechos, ni tampoco su hermano.
En ese momento, mientras buscaba a los presuntos responsables de la balacera en el gimnasio, “El Ostión” fue detenido por policías de investigación, quienes lo trasladaron a la Fiscalía de Homicidios de la PGJ. Ahí se entera que también se le relaciona con el “levantón” de los 13 jóvenes de Tepito del Bar After Heaven.
La emboscada
A cuatro años de la vinculación de su hermano “El Ostión” en el caso Heaven, el presunto fundador de la organización criminal La Unión de Tepito fue abatido en una emboscada, ya que su esposa refiere que una persona específica le llamó a su celular y lo citó para reunirse con urgencia.
A partir de las cámaras de videograbación de la Secretaría de Seguridad Pública local, se sabe que en aquella “trampa” para asesinar a “Pancho Cayagua” participaron al menos cuatro sicarios que lo esperaban a bordo de motocicletas.
Luego de cometer el crimen de “Pancho Cayagua”, los presuntos homicidas salieron del estacionamiento del centro comercial al norte de la Ciudad de México donde ocurrieron los hechos y huyeron con destino al Estado de México.