¿A qué o quién le teme la maestra que ante las violentas manifestaciones el Gobierno del Distrito Federal (GDF) tuvo que custodiar uno de sus inmuebles para que a través de la policía capitalina se le diera protección y garantías?
Será porque acaba de reelegirse otros seis años al frente del Sindicato Nacional de Trabajadores de la Educación (SNTE) o porque recientemente lanzó un incendiario discurso en el que gritó a los cuatro vientos que ella no era sirvienta de nadie.
Pero ya está de regreso en el ojo del huracán la polémica Elba Esther Gordillo.
Y es que en medio de los reflectores, la maestra Elba Esther Gordillo le teme a alguien o algo, pues en estos días su departamento ubicado en las calles de Campos Elíseos y Galileo, en la costosa zona de Polanco en el Distrito Federal, ha sido resguardado por un grupo de policías de la Secretaría de Seguridad Pública del Distrito Federal (SSPDF).
¿A qué o quién le teme la maestra que ante las violentas manifestaciones el Gobierno del Distrito Federal (GDF) tuvo que custodiar uno de sus inmuebles para que a través de la policía capitalina se le diera protección y garantías?
Documentos de la Dirección General de la Policía Metropolitana de la SSPDF que refieren la relación de “Servicios Extraordinarios” cubiertos en la capital, reportan la protección al inmueble propiedad de Elba.
En estos se informa de la puesta en marcha de un punto de apoyo con elementos policiacos frente al domicilio de Elba Esther Gordillo, en Galileo y Campos Elíseos, ante la presencia de un grupo de la Coordinación Nacional de Trabajadores del Estado (CNTE), la llamada “Coordinadora” provenientes de los estados de Michoacán, Oaxaca, Tlaxcala y Guerrero.
Frente al inmueble, maestros pertenecientes a este movimiento adverso a su sindicalismo, maestros provenientes de diversos estados repudiaron el cacicazgo de Elba Esther y la reelección de esta al frente del SNTE hasta el 2018.
Pese a la presencia de los uniformados de la policía capitalina, los maestros de la llamada “Coordinadora” llamaron “espuria” a la maestra, a quien le exigieron su salida del SNTE y su encarcelamiento por la serie de “tropelías”, como ellos lo llamaron, que ha realizado en contra de los derechos de los trabajadores de la educación.
¿Es acaso un repudio y exigencia sorda? No hay quien de marcha atrás a los próximos seis años de sindicalismo de los maestros pese a todos los calificativos que estos maestros lanzaron contra la polémica lideresa.
En ese mitin-protesta frente a su departamento en Polanco, los supuestos maestros que persiguen a Elba Esther Gordillo a los eventos a los que se presenta, no pasaron por alto la alusión que la líder hizo al presidente electo, “el que anda de viaje por Europa”, Enrique Peña Nieto.
Tras Elba Esther hay más de uno que está enojado y que la responsabiliza del asesinato de maestros, del despido injustificado de otros en el estado de Puebla, de la represión en escuelas normales rurales e incluso de la reciente violencia ocurrida en el estado de Michoacán contra estudiantes normalistas.
Más de uno quisiera comérsela viva. ¿Enviados o verdaderos maestros? La protesta frente al departamento de Elba en Polanco terminó con la quema de un monigote de cartón que aludía a la imagen de la líder.
Seguro la maestra no estaba en su departamento de Polanco, pero sus enemigos ya lo tienen bien ubicado.
