¿Qué pasa en Oaxaca?
En Oaxaca todos protestan contra todos.
Lo hacen los maestros del CNTE, que tienen tomados desde meses edificios públicos inconformes por la reforma educativa.
También los policías estatales, amotinados desde hace dos semanas en un cuartel policiaco reclamando mejores salarios.
No se diga los transportistas y los taxistas que se enfrentan de manera violenta en las calles de esta ciudad del sur de México.
Indigo StaffEn Oaxaca todos protestan contra todos.
Lo hacen los maestros del CNTE, que tienen tomados desde meses edificios públicos inconformes por la reforma educativa.
También los policías estatales, amotinados desde hace dos semanas en un cuartel policiaco reclamando mejores salarios.
No se diga los transportistas y los taxistas que se enfrentan de manera violenta en las calles de esta ciudad del sur de México.
El colmo de las protestas ocurrió ayer cuando escolares de un pueblo de Oaxaca, San Jacinto Amilpas, salieron a las calles para protestar contra sus maestros paristas que tienen tomadas sus escuelas en la localidad de San Jacinto Amilpas.
El grupo de alumnos de secundaria, primaria y preescolar tomaron una de las la calle ubicadas frente al Poder Judicial de la Federación para exigir a las autoridades el desalojo de los profesores paritas.
Los niños protestan en contra de la protesta de sus profesores.
Hoy en Oaxaca –a cargo del gobernador Gabino Cué- lo que impera es el caos, el desgobierno y la impunidad.
El día ayer se cumplieron 17 días el amotinamiento que mantienen policías estatales de Oaxaca que protestan para mejorar sus salarios y prestaciones.
Los agentes policiacos –que algunos estiman en 2 mil efectivos- están atrincherados desde el 30 de enero en un cuartel policiaco de Santa María Coyotepec.
El día de ayer se venció el ultimátum que fijó el gobierno de Gabino Cué para que los policías levantaran el paro y se presentaran a trabajar en las instalaciones del estadio de futbol Benito Juárez.
Muy pocos lo hicieron.
El Gobierno de Oaxaca ha advertido que iniciará un procedimiento para sancionar a los policias “paristas”, que ayer continuaban con el control de las instalaciones policiacas e incluyendo armando y equipamiento.
En un intento por resolver el conflicto, el gobierno de Cué anunció el incremento de un 10 por ciento en los sueldos que reciben los elementos policiacos.
Hay una fuerte tensión en estos momentos en Oaxaca por la posibilidad de un desalojo violento de la protesta de los policías.
La semana pasada la Policía Federal intentó un desalojo de las instalaciones tomadas por los efectivos estatales, sin embargo la acción dejó varios heridos y enfrentamiento a balazos entre los elementos.
Miguel Ángel Muñoz, vocero del estado de Oaxaca, ha dicho que buscan una solución pacífica de este conflicto que ya se prolonga por más de 2 semanas.
Hasta anoche el cuartel seguía tomado por los policías “paristas”.
La mesa de negociación, en la que participa Arturo Peimbert, defensor de derechos humanos de Oaxaca, no ha logrado que los agentes estatales levanten el paro.
En las dos semanas en que los policías no han estado en las calles se han registrado en Oaxaca 11 ejecuciones sin que las autoridades policiacas hayan intervenido.
La vigilancia en Oaxaca en estos días de paro ha estado cargo de agentes de tránsito, que han tomado las funciones de seguridad que dejaron los elementos policiacos.
El conflicto con los policías se suma a las movilizaciones que a diario en Oaxaca realizan profesores del CNTE, que la semana pasada llevaron a cabo el plantón de tres días en la Ciudad de México en avenidas como Paseo de la Reforma para protestar en contra de la reforma educativa.
Los transportistas también están inconformes.
Ayer miembros de la Alianza Mexicana d Transportistas protestaron contra el alza en el combustible y la orden de renovar su flotas.