Quieren quitarle el fuero

Con la finalidad de quitarle el fuero a Samuel García, diputado local de Movimiento Ciudadano, el director del Instituto Ciudadano de Estudios Estratégicos (Incide), Ernesto Cerda Serna, interpuso ayer un oficio en la Oficialía de Partes del Congreso para que se inicie un juicio político en su contra.

Con eso pretenden iniciar un proceso penal en contra de García sin el goce del fuero, denunciándolo por desvío de recursos públicos y fraude fiscal.

Lo anterior, luego de que Reporte Indigo revelara que la bancada de Movimiento Ciudadano –de la que también forma parte la diputada Concepción Landa- ha emitido facturas por un monto superior a los 30 mil pesos a una empresa que además de fantasma es todóloga.

Se trata de SOLARHIC S DE RL DE CV, una empresa que ha concursado incluso en licitaciones de otros estados, y que su razón social está registrada en una “minicasita” en el municipio de Juárez, Nuevo León.

La bancada de Movimiento Ciudadano intentó justificar los traspasos al comentar que el servicio fue cancelado y que la compañía había devuelto el dinero, sin presentar evidencias de los trabajos realizados.

“Nosotros estamos solicitando el juicio político para que después del fuero, pueda enfrentar las denuncias penales que estamos preparando”, dijo Cerda Serna.

“Nosotros también el día jueves (mañana) estaremos entregando a la dirección de Autoridad Fiscal federal una denuncia de hechos para que inicie las investigaciones de auditorías que correspondan”. 

Será este mismo jueves cuando el director del Incide también solicite por medio de transparencia a la fracción de Movimiento Ciudadano, que presenten cada uno de los cheques que han emitido como bancada desde el Periodo anterior a la fecha.

“Para proceder contra un diputado, hay que quitarle el fuero. Necesitamos que se inicie el proceso de desafuero, para que entonces pueda de manera directa enfrentar a las autoridades tanto penales, en el caso de desvío de recursos públicos, así como también la posible defraudación fiscal”, comentó.

En caso de que García sea encontrado culpable de los cargos por desvío de recursos públicos y fraude fiscal, agregó Cerda Serna, el diputado sería sancionado con hasta seis años de prisión por las autoridades competentes.

Los caudales del erario

El desvío de recursos públicos es un delito tipificado en la fracción l del Artículo 211 del Código Penal de Nuevo León.

“Comete delito en contra del patrimonio del Estado o los Municipios el servidor público que teniendo a su cargo caudales del erario, les dé una aplicación pública distinta a aquella a que estuvieren destinados, o hiciere un pago ilegal”, dice el Código Penal.

Cerda Serna exhortó a García para que predique con el ejemplo y por su propia cuenta se deshaga del fuero.

De lo contrario, el asunto se resolvería en el Pleno del Legislativo, donde tendría que alcanzar hasta 28 votos de los 41 diputados que hay (sin contar al diputado de Movimiento Ciudadano).

“A ver si es cierto que dignifica la profesión y renuncia. Lo menos que puede hacer es retirarse (García) para que una vez sin fuero, se enfrente a estas acusaciones”, retó el director del Incide.

Enfatizó que en el transcurso de la próxima semana se buscará retirarle el fuero a la también diputada de Movimiento Ciudadana, Concepción Landa.

“Por separado vamos a iniciar el proceso contra Landa porque no puedes hacerlo en forma colectiva. Tiene que ser en forma individual”, aseguró.

“Como son electos por la vía plurinominal tiene que ser en forma individual la denuncia de cada uno de ellos”.

Cerda Serna comentó que de momento no procederán penalmente en contra de la bancada de Movimiento Ciudadano por estar protegidos por el fuero.

Por su parte, Samuel García comentó que hoy mismo se deberá de leer en el Pleno el oficio entregado por Cerda Serna para posteriormente enviarse a la Comisión Anticorrupción para que el asunto no quede en “un limbo”, y de corresponder sanciones, que se apliquen.

El diputado aseguró que de momento no dará de baja a su asesor de coordinadores, Alan García, por contratar servicios de una empresa fantasma.