Diputados del Congreso local aprobaron a la empresa Agua y Drenaje de Monterrey reestructurar un deuda de 3 mil 362 millones 986 pesos y la contratación de más por 2 mil 500 millones de pesos para la construcción de la Presa Libertad en Nuevo León.
El dictamen no establece que la empresa pueda aumentar la tarifa en el consumo del agua para poder pagar la nueva deuda, que será por un plazo de 25 años, y tendrá que presentar un informe trimestral en torno al crédito.
Sin embargo, el coordinador de la bancada del PAN del Congreso local, Carlos de la Fuente, dijo que la empresa tomará la decisión del tipo de crédito que hará para el endeudamiento, y solo se le sugirió que fuera por un banco.
“Es un endeudamiento de Agua y Drenaje, ellos sabrán el mecanismo de utilización, pero se le solicitó que pusieran una tabla de amortizaciones que no venía inicialmente en la información que solicitaron.
“No viene especificado, solo dice que es a través de la banca, y serán de las cosas que estaremos observando”, dijo el diputado panista.
Según el legislador dijo que con la reestructura y la nueva deuda no amortización no se incrementara.
“Aunque en la presentación que nos hicieron si venía, por eso lo que yo decía, que aunque habría más endeudamiento con la reestructuración de la deuda actual, mas la deuda nueva, la amortización ya no se incrementa la deuda”, dijo diputado albiazul.
Con esto, la empresa Agua y Drenaje de Monterrey tendrá que pagar un endeudamiento de 5 mil 862 millones de pesos.
Los riesgo de Presa Libertad
Reporte Índigo adelantó que el Resumen Ejecutivo de la Manifestación de Impacto Ambiental, que fue entregado a la Semarnat por el gobierno de Jaime Rodríguez, carece de coordenadas exactas de la ubicación el embalse, zona en donde existen por lo menos siete vestigios arqueológicos.
Pero además la presa estará a 35 kilómetros de una falla geológica, lo que favorece a posibles eventos sísmicos en la zona y podría generar un riesgo para el embalse.
Además, el Atlas Nacional de Riesgo revela que la Presa Libertad estará ubicada en una zona de deslizamiento de laderas, que podría ocasionar derrumbes de rocas en la zona y suelo, advertencia ignorada por el Gobierno del Estado.
El coordinador de la bancada del PRI, Francisco Cienfuegos, dijo que la deuda no será un cheque en blanco para el Gobierno del estado, por lo que se propuso un transitorio para que se estableciera varios candados.
Y es que, se intenta que los recursos de la deuda contratada para la presa sea liberado y ejercerse solamente cuando reciba la partida presupuestal ofertada por la Federación para la obra.
