Refugios de mujeres a la deriva por presupuesto

La Red Nacional de Refugios exige al Gobierno federal que no recorte su presupuesto para el 2020, pues esto pondría en riesgo el apoyo que brindan a mujeres víctimas de violencia en todo el país
Montserrat Sánchez Montserrat Sánchez Publicado el
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La Red Nacional de Refugios ve en riesgo su labor de proteger a las mujeres víctimas de violencia para el 2020 si no se le asigna el presupuesto necesario.

Es por ello, que la Red pidió al Gobierno federal respete los recursos que programará en el Presupuesto de Egresos de la Federación para el siguiente año y así comprometerse en reducir los altos índices de feminicidios y violencia intrafamiliar.

En conferencia de prensa y en el marco de sus 20 años de trabajo, Wendy Figueroa, directora general de la Red, mencionó que la labor de los refugios es vital para mantener vivas a las mujeres.

Nosotras sabemos que para que una política pública o programa pueda funcionar y no se quede solo como una promesa al aire debe de tener presupuesto suficiente para operar. Tenemos datos que muestran que el 54.4 por ciento de las mujeres en refugios no pidió apoyo a instituciones de gobierno por no creer en ellas
Wendy FigueroaDirectora de la Red Nacional de Refugios

También destacó que anualmente se atiende a casi 20 mil mujeres y que el 89 por ciento de quienes estuvieron en algún refugio disminuyó sus niveles de depresión y ansiedad, fortalecieron su desarrollo integral, su autoestima y toma de decisiones; por ello afirmó que es fundamental que estrategias como esta sigan existiendo.

Feminicidios al alza, menos presupuesto para refugios

En los últimos cinco años, el 90 por ciento de las mujeres vivió violencia dentro del ámbito familiar, 84.4 por ciento de las usuarias de refugios sufrieron algún tipo de agresión por parte de su pareja y el 72 por ciento se enfrentó a un incidente violento en su propia casa. Es decir, más de la mitad de las víctimas cohabitaron con sus agresores, informó Figueroa.

De acuerdo con la investigadora y creadora del mapa nacional de feminicidios, María Salguero, la importancia de los refugios es fundamental en un país en el que se cometen 10 asesinatos de mujeres por día.

Los refugios son insuficientes ante el número de víctimas pero son necesarios, se ha documentado que en más de un caso son las propias autoridades ministeriales quienes buscan persuadir a la víctima y lograr que no denuncie, le dicen que no está suficientemente golpeada, que no se le ven los golpes o incluso lo piensen bien porque entonces quién las va a mantener
María SalgueroCreadora del Mapa del Feminicidio

“Entonces tenemos un contexto en el que las autoridades ni ayudan ni protegen y como resultado se ve que de enero a octubre de este año tenemos un promedio de 10.33 mujeres asesinadas cada día”, agregó.

Cifras oficiales contenidas en los reportes del Secretariado Ejecutivo del Sistema Nacional de Seguridad Pública (SESNSP) revelan que entre enero y octubre del 2019 hubo registro de 833 víctimas de feminicidio, lo que significa un incremento del 12 por ciento de casos con respecto al mismo periodo del año anterior.

833
feminicidios se cometieron en México entre enero y octubre de 2019

Además, otras 2 mil 309 mujeres fueron asesinadas en todo el territorio nacional en los primeros 10 meses de este año.

Veracruz es la entidad con más casos de feminicidio con 153, le siguen el Estado de México con 95, Nuevo León con 58; Puebla con 52 y la Ciudad de México con 50.

Salguero agregó que la cifra de feminicidios a nivel nacional no es certera, debido a que muchos de los casos que la autoridad cataloga como homicidios dolosos en contra de mujeres deberían ser indagados bajo el protocolo de violencia de género.

La activista recordó que, de acuerdo con la Organización Mundial para la Salud (OMS), el hecho de que se cometan 10 asesinatos al día es considerada una epidemia de violencia y lamentó que en México la seguridad y protección de las mujeres ya es un tema incontrolable. Por esa razón, expresó que es necesario tener más refugios y salvar la vida de las mujeres.

Por su parte, Cecilia Toledo, de Fundar, afirmó que tener incertidumbre de sufrir recortes presupuestales dificulta la operación de cualquier programa o ayuda.

“Lo que vemos ahora en este nuevo gobierno y la ideología de austeridad es que para las acciones sobre atención de violencia no hay un presupuesto que garantice el pleno derecho a una vida libre de violencia para las mujeres.

“Para el próximo año se plantea dar 380 millones de pesos para refugios pero no podemos decir que es un triunfo, tenemos que ver su distribución, ya que el 80 por ciento de los estados del país cuentan con alerta de género; entonces hay que saber dónde hay más violencia y cómo la vamos a combatir”, detalló.

Patricia Olamendi del Instituto de Formación en Justicia y Derechos Humanos sostuvo que ayudar a las mujeres a acceder a una vida libre de violencia no es un asunto de buena voluntad sino que es obligatorio.

20 mil
mujeres son atendidas en los refugios cada año, aproximadamente

“En el Artículo ocho de la Convención Interamericana de Derechos Humanos se establece que para prevenir, sancionar y erradicar la violencia existan estos refugios pero ahora vemos que la respuesta del Estado mexicano es extremadamente limitada frente a la magnitud de la violencia contra las mujeres y es grave porque hablamos que es un país donde 7 de cada 10 mujeres son víctimas de alguna forma de violencia y 5 de cada 10 hombres violentan a mujeres. Por eso la falta de apoyo gubernamental se puede traducir en una actitud limitada, precaria, ausente y desinformada de lo que viven diariamente”, dijo.

La Red solicitó al Gobierno federal invertir para que las mujeres tengan una vida libre de violencia, garantizar el acceso a servicios esenciales para la seguridad integral y la protección de sus derechos como lo son los refugios, contemplando sus centros de atención, casas de emergencia, casas de transición y servicios necesarios para sobrevivir de violencia como empleo y vivienda.

Además, exigieron mantener la autonomía de los refugios de organizaciones de la sociedad civil para responder al derecho de elegir libremente dónde recibir acompañamiento y atención así como acciones necesarias para poner fin a la impunidad y garantizar se juzgue con perspectiva de género todos los casos de violencia que así lo requieran.

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