Renace conflicto de taxis por apps
Conductores concesionados acusan que plataformas como Uber y Cabify violan la Ley Movilidad de la Ciudad de México y exigen que sean reguladas para la prestación del servicio
Erick MirandaEn la Ciudad de México se han vuelto a encender las alarmas por la vieja disputa entre taxistas y plataformas de transporte privado.
La decisión del Gobierno capitalino de revisar la situación de los mototaxis para su regulación provocó que grupos de choferes concesionados también exijan lo mismo para plataformas como Uber y Cabify, a quienes acusan que llevar casi 6 años operando de manera ilegal.
En las últimas dos semanas, organizaciones de radio taxis y bases de sitio se han concentrado en las inmediaciones del Antiguo Palacio del Ayuntamiento para demandar a la actual administración de Claudia Sheinbaum establecer lineamientos de “piso parejo”.
Los agremiados insistieron públicamente en que con la operación de estas empresas se viola el acuerdo del 15 de julio de 2015 publicado en la Gaceta Oficial de la Ciudad de México, en el cual quedó establecido que los vehículos particulares que presten servicio de transporte de pasajeros sin concesión alguna están sujetos a recibir sanciones.
Con siete apps en funcionamiento y casi seis años de operación, es impensable que el gobierno capitalino no tenga un censo de cuántas personas violan los artículos 258 y 260 de la Ley de Movilidad local, critica en entrevista Daniel Medina, vocero de la agrupación de Taxistas Organizados de la CDMX.
“Una competencia desleal entre prestadores de servicios legales y supuestos socios de empresas transnacionales es lo que se ha agudizado con la entrada de cada aplicación, además de que estos modelos de negocio han creado un ambiente de caos en materia de movilidad debido a la sobreoferta”, sostiene el líder.
Las pérdidas de los agremiados afectan aproximadamente a 140 mil familias tan solo en la Ciudad de México, asegura Medina, por lo que urge que se tomen cartas en el asunto y a favor de quienes sí se encuentran dentro del marco jurídico establecido en la referida Ley, aprobada por la entonces Asamblea Legislativa del Distrito Federal (ALDF).
Además, acusa, la inseguridad es otro factor que marca la operación de estas empresas, ya que debido a que no hay una plena identificación del vehículo, del propietario o del operador en turno, no siempre existe la certeza de poder denunciar cualquier clase de delito relacionada con la unidad.
Daniel Medina considera un intento fallido de regulación la operación de unidades alternativas de transporte como mototaxis, bicicletas y scooters sin anclaje en la ciudad.
“Si se va a modificar la Ley para admitir a un sector o dar oportunidades justas, también que se haga para todos los sectores y en beneficio de una movilidad general, ya que para eso se elaboran leyes y las mismas deben respetarse”, añade.
“Nosotros seguiremos por la vía legal nuestra lucha durante esta semana con escritos, conferencias y concentraciones sociales para hacer presión y así exigir las condiciones que el gremio demanda, procurando afectar lo menos posibles a la ciudadanía. Sin embargo, de no darse una respuesta de parte del Gobierno, no se descarta una afectación severa como la que ocurrió 2015”, advierte.
Medidas necesarias
Para no generar una sobreoferta de taxis por aplicación en la Ciudad de México es necesario que autoridades capitalinas levanten un censo de los vehículos habilitados para tales funciones y a su vez mantengan una estrategia coordinada que contemple a los proveedores de este tipo de servicios, explica Víctor Alvarado, coordinador de Transporte Eficiente de El Poder del Consumidor.
“Todas las empresas y privados tienen el derecho a generar una libre competencia, por lo que sería un error determinar de manera tajante quién sí o quién no puede operar, sin embargo, es necesario que se establezcan estatutos y lineamientos”, indica.
Para que cualquier servicio público de transporte individual de pasajeros funcione de un manera correcta es indispensable que se cumplan al menos tres requisitos: operadores capacitados, unidades seguras y padrones vehiculares que permitan una identificación, dice el especialista.
“Si lo que se quiere es establecer una base pareja para toda la red de movilidad, de entrada se deben de tener los datos de los interesados para poder hacer una planificación de estrategias de transportea nivel de la ciudad y no específicamente en beneficio de un gremio u otro, sino en favor de toda la red de movilidad existente”, puntualiza.
Beat, la más reciente
La última aplicación de servicios privados por chofer en incorporarse en la Ciudad de México es Beat, la cual inició operaciones el pasado 18 de febrero.
La app, perteneciente a la compañía dueña de Mercedes Benz, llegó con la intención de expandirse en más ciudades del territorio nacional como Guadalajara y Monterrey