Cuando Enrique Alonso expulsó al Mando Único de Tlalquiltenango, Morelos, municipio del que es alcalde, argumentó su facultad constitucional de manejar las tareas policiales por sobre la disposición del Gobierno del Estado, y tomó las instalaciones de la policía.
Hace unos días, luego del asesinato de Gisela Mota, alcaldesa de Temixco, el gobernador Graco Ramírez indicó que el Mando Único policial se instrumentará en los municipios de Morelos.
Enrique Alonso se negó a esa “intromisión”; el gobernador lo acusó de tener nexos con el crimen organizado, incluso de haber sido señalado por cometer delitos de trata de personas en el sur del país.
“El actual alcalde evidentemente e insistentemente no quiere que haya intromisión de parte de nosotros, para que hagan de la suya los delincuentes”, acusó el gobernador morelense.
Enrique Alonso llevó su caso hasta la Suprema Corte de Justicia de la Nación, donde fue rechazada su petición para detener la intromisión del gobierno estatal; le dijeron, eso sí, que revisarán el mecanismo.
Las especulaciones sobre el caso están en el aire; de lo que sí hay certeza, es que el Mando Único no está regulado y por ello su aplicación es tan cuestionada.
Morelos está siendo un llamado para todas las entidades del país.
En noviembre del 2014, el presidente Enrique Peña Nieto presentó un paquete de iniciativas en materia de seguridad y justicia, entre las que se encontraba una propuesta para implementar el mando único en todo el país.
La propuesta del presidente disponía la desaparición de los cuerpos municipales de policía.
La medida despertó el rechazo de la oposición; ahora, tanto el Ejecutivo como los gobernadores trabajan en una nueva propuesta que pueda transitar por las bancadas y lograr la aprobación.
El modelo de Mando Único que impulsa la Conago está basado en la disposición constitucional de que las entidades pueden hacer convenios para instrumentarlo en los municipios.
La Carta Magna establece también que, en un caso extraordinario, el gobierno estatal puede ordenar que se implemente el mando único en los municipios de su entidad.
Ese fue el caso de Morelos; y eso fue lo que despertó la inconformidad de algunos alcaldes morelenses.
Ahora, los gobernadores y el Ejecutivo han discutido un modelo que no desaparezca totalmente a los cuerpos policiacos locales.
En las próximas semanas, el Ejecutivo enviará una nueva iniciativa que resucitará el debate que se encuentra en la congeladora del Senado.
Ahora, se prevé que la propuesta incluya la disposición de mantener un cuerpo policiaco en los municipios para asuntos administrativos.
El combate al delito quedará en manos del cuerpo estatal, que estará bajo el dominio de un mando único.
El PRI ha anunciado que flexibilizará su postura y buscará crear un modelo de mando único policial que satisfaga a la mayor parte de los grupos políticos del Congreso de la Unión.
“En el Senado estaremos muy atentos a las diversas expresiones respecto a este tema, y atenderemos propuestas como la anunciada por la Conago, que serán fundamentales para la toma de decisiones”, afirmó Emilio Gamboa, coordinador de la bancada del PRI en la Cámara Alta.
La nueva propuesta que verá la luz en las próximas semanas, incluirá elementos que fueron propuestos por el PAN en su propuesta de legislación en materia de seguridad, donde se plantea que no dejen de existir los cuerpos locales de policía para llevar a cabo tareas de convivencia en las comunidades.
La urgencia de regular este modelo es evitar que haya un manejo discrecional sobre la figura y se utilice con fines políticos o se quite autonomía a los municipios.
Con la regulación, que quedaría plasmada en la Constitución Política, se pretende que la aplicación del mando único no quede en la voluntad discrecional del gobierno estatal, sino que sea un mecanismo con una raíz jurídica sólida.
Los municipios, en alerta
Aunque haya acuerdos en el Congreso de la Unión para pasar un modelo de mando único, el verdadero cabildeo estará un eslabón más abajo, con los gobiernos municipales, que ya han tenido influencia en que el tema haya sido enterrado en el Senado.
La Asociación Nacional de Alcaldes (ANAC), que agrupa a los presidentes municipales emanados del Partido Acción Nacional (PAN), fue uno de los organismos que presionó a los senadores del albiazul para que ni siquiera admitieran a discusión la propuesta presidencial.
En un principio, a finales del 2014, los senadores del blanquiazul afirmaron que revisarían la iniciativa presidencial; sin embargo, después de que sus alcaldes se pronunciaron contra la figura, los legisladores se cerraron siquiera a la discusión.
Desde entonces, el tema no transitó siquiera por las comisiones de la Cámara alta.
Ahora, ya con una nueva iniciativa en el ambiente, la ANAC ha vuelto a expresar su rechazo a la figura del mando único y ha llamado, más bien, a fortalecer las policías locales.
Una de las propuestas de esta asociación es crear cuerpos policiacos con presupuesto de base cero, donde se liguen los resultados policiales a la obtención de recursos, pero sin dejar de lado la seguridad de que existirá presupuesto suficiente.
El recurso para los cuerpos policiacos, expone la ANAC, saldría de un impuesto que se crearía exprofeso para el funcionamiento y equipamiento de los cuerpos policiacos en cada municipio.
A la ANAC se suma la Asociación de Autoridades Locales de México (AALMAC), que reúne a los gobiernos municipales del PRD.
Esta asociación ha expresado también su rechazo al modelo de Mando Único, bajo el argumento de que se trata de una estrategia para debilitar a los municipios.
En sentido contrario, la Federación Nacional de Municipios de México (FENAMM), que agrupa a los presidentes municipales gobernados por el PRI, ha expresado su apoyo a la propuesta presidencial, afirmando que es un primer paso a la consolidación de las policías en las localidades.
El PRI en el Congreso de la Unión tiene la encomienda de que una vez que inicie el periodo ordinario de sesiones, el 1 de febrero próximo, se impulse de manera express la discusión del Mando Único policial y se hagan los ajustes para que transite a los congresos locales.