Roberto Borge Angulo, el exgobernador de Quintana Roo, será el siguiente en la lista de exmandatarios procesados por diversos delitos en México.
Capturado hace siete meses en Panamá, se espera que Borge vuelva a pisar tierras mexicanas este jueves, después de que la justicia de ese país aprobara su extradición.
El quintanarroense llegará al país y será puesto a disposición de las autoridades mexicanas, quienes lo procesarán en el fuero común por los delitos de aprovechamiento ilícito del poder, desempeño irregular de la función pública y peculado; y por el fuero federal de operaciones con recursos de procedencia ilícita o lavado de dinero.
Borge se convertirá así en el sexto exmandatario que se encuentre preso en México por delitos cometidos durante su administración de gobierno.
Se suma a la lista de otros exgobernadores que ya se encuentran en prisión: Javier Duarte, de Veracruz; Andrés Granier, de Tabasco; Guillermo Padrés, de Sonora; Eugenio Hernández, de Tamaulipas; y Jesús Reyna, de Michoacán.
También en prisión pero fuera del país está Tomás Yarrington, exmandatario de Tamaulipas.
Además de ellos, otros exgobernadores tienen procesos abiertos, aunque los enfrentan en libertad.
El ascenso y la caída
Roberto Borge Angulo fue gobernador de Quintana Roo entre el 2011 y el 2016; fue señalado como uno de los nuevos talentos del PRI por el presidente Enrique Peña Nieto junto con Javier Duarte, de Veracruz, y César Duarte, de Chihuahua.
Proviene de una familia ligada a la política, pues es sobrino de Miguel Borge Martín, quien fue gobernador de Quintana Roo entre 1987 y 1993; tiene parentesco, además, con Kamel Nacif, el empresario conocido como el “rey de la mezclilla” que fuera involucrado en un escándalo de pederastia.
A los 23 años ya era el encargado de relaciones públicas de la secretaría de Desarrollo Económico de su estado, a los 26 años ya era secretario particular del gobernador electo Félix González Canto y a los 32 ganó las elecciones para la gubernatura de Quintana Roo.
Después de que Grupo Expansión y Mexicanos contra la Corrupción y la Impunidad revelaran una red de despojo de propiedades, operaciones fraudulentas mediante empresas fantasma y juicios laborales inventados, para robar dinero a empresarios, en agosto del 2016, el Servicio de Administración Tributaria (SAT) reveló que investigaba al gobierno de Borge.
A mediados de diciembre del 2016, el PRI lo expulsó del partido y con la llegada de Carlos Joaquín a la gubernatura, la Fiscalía estatal comenzó una investigación formal en su contra y, por su parte, la PGR investigó el delito federal de lavado de dinero.
Un juzgado con residencia en Nezahualcóyotl, Estado de México, concedió una orden de aprehensión el 31 de mayo del 2017 por el delito de operaciones con recursos de procedencia ilícita.
La PGR pidió entonces el apoyo de la Interpol, quien emitió una ficha roja para su ubicación.
Unos días después, el 4 de junio del 2017, Roberto Borge fue detenido en el aeropuerto de Tocumén, en Panamá, cuando iba a abordar un avión que lo llevaría a París, Francia.
Desde esa fecha permaneció en prisión en Panamá. Autoridades panameñas revelaron que este 4 de enero funcionarios de la PGR viajarían a Panamá para recoger al detenido y traerlo de regreso a México.
El sexto en México
Roberto Borge se convertirá hoy en el sexto exgobernador encarcelado en México acusado de diversos delitos.
En México está preso el exgobernador de Tabasco, Andrés Granier Melo. Fue acusado por los delitos de operaciones con recursos de procedencia ilícita y defraudación fiscal. Fue detenido en junio del 2013, desde entonces Granier Melo sigue su proceso judicial privado de su libertad en la Torre Médica del reclusorio de Tepepan, en la capital del país, supuestamente por padecer problemas del corazón.
Siete son los exmandatarios presos, seis se encuentran recluidos en el país y del otro continúa pendiente el proceso de extradición
Jesús Reyna García, quien fuera mandatario interino de Michoacán en 2013, fue aprehendido tras ser acusado de tener nexos con el grupo criminal de Los Caballeros Templarios.
Guillermo Padrés, quien gobernó Sonora de 2009 al 2015, permanece en prisión desde noviembre del 2016 acusado de enriquecimiento ilícito, desvío de recursos públicos y delincuencia organizada. Se entregó voluntariamente a la justicia y permanece en prisión.
Javier Duarte de Ochoa, quien gobernó Veracruz entre el 2012 y el 2016, fue acusado de desviar más de 35 mil millones de pesos. Estuvo prófugo por seis meses. Fue detenido en Guatemala en abril del 2017 y extraditado a México en julio del 2017; está preso en el Reclusorio Norte de la Ciudad de México, donde sigue su proceso judicial.
La detención más reciente de un exmandatario fue la de Eugenio Hernández, quien gobernó Tamaulipas entre el 2005 y el 2010. Fue detenido en octubre del 2017 por el delito de lavado de dinero y peculado.
En Estados Unidos se le sigue también un proceso judicial, por lo que fue solicitada su extradición a ese país, misma que podría resolverse en los próximos meses.
Quien permanece en el extranjero es Tomás Yarrington Ruvalcaba, gobernador de Tamaulipas entre 1999 y 2005, quien fue detenido por la Interpol en Florencia, Italia.
La investigación contra Yarrington comenzó en 2012, cuando en Estados Unidos un testigo protegido lo acusó de haber lavado millones de dólares de las organizaciones criminales de Los Zetas y el Cártel del Golfo mientras era gobernador.
En México también se abrió una investigación en su contra por supuestamente haber pactado con el narcotráfico y recibir dinero del crimen.
Yarrington permanece encarcelado en Italia tratando de que aquel gobierno no apruebe la petición de extradición que realizó el gobierno mexicano.
