Hace dos días, Iván Cazarín, alias “El Tanque”, fue detenido en Tlajomulco de Zuñiga, Jalisco, por Fuerzas Federales.
Las secuelas de la captura del que ha sido identificado como segundo al mando del Cártel de Jalisco Nueva Generación (CJNG), aún continúan dejando rastro de violencia.
Entre la madrugada de ayer y lo que va de hoy, siete personas fueron asesinadas a balazos en diversos puntos de la zona metropolitana de la capital del estado.
Primero, una triple ejecución tuvo lugar la noche del jueves dentro del restaurante “El Marques”, ubicado en la zona Minerva.
De acuerdo con testigos de los hechos, un comando armado irrumpió en el lugar, caminó hasta la zona de la terraza y abrieron fuego contra sus víctimas. Un comensal que estaba en otra de las mesas también fue alcanzado por los proyectiles y resultó herido de gravedad.
Durante la madrugada de este viernes, un menor de edad fue asesinado en la colonia Talpita, mientras que su acompañante resultó herido al ser agredidos a balazos por un desconocido.
En Tlaquepaque otros dos hombres murieron en el antiguo Camino a Toluquilla. Los hombres viajaban en un auto Nissan March cuando tres pistoleros les cerraron el paso en un auto Honda Civic Blanco. Luego les dispararon en varias ocasiones.
También en Zapopan, fue ajusticiado otro hombre, mientras manejaba un auto Shadow en color blanco por las calles de Benito Juárez y Josefa Ortiz de Domínguez en la colonia Agua Blanca.
“El Tanque”, operaba en las regiones del Centro, Valles y Sierra Occidental de Jalisco, así como en el Estado de Veracruz, de acuerdo con fuentes federales y se dedicaba a “blanquear” los recursos del CJNG.
Cazarín Molina, quien fue consignado hace unas horas por la PGR, junto con tres integrantes más de este grupo criminal, es a quien se le relaciona con el derribo de un helicóptero militar ocurrido el pasado primero de mayo, en Villa Purificación, Jalisco.
