La militarización de Mauricio
El Municipio de San Pedro, considerado como un modelo a seguir por su perfil ciudadano, se trasformará en duro régimen militar en ciertas áreas municipales.
Los mandos ciudadanos en Policía, Alcoholes y Tránsito, que cuidaban y conocían a los hijos de los empresarios sampetrinos y dueños de antros, ahora será cosa del pasado.
El alcalde Mauricio Fernández, sin una consulta ciudadana, ha tomando la decisión de contratar a mandos con carrera militar en la Policía para bajar los índices de inseguridad que tiene en este municipio, pero esto ha servido de muy poco.
Jesús Padilla
El Municipio de San Pedro, considerado como un modelo a seguir por su perfil ciudadano, se trasformará en duro régimen militar en ciertas áreas municipales.
Los mandos ciudadanos en Policía, Alcoholes y Tránsito, que cuidaban y conocían a los hijos de los empresarios sampetrinos y dueños de antros, ahora será cosa del pasado.
El alcalde Mauricio Fernández, sin una consulta ciudadana, ha tomando la decisión de contratar a mandos con carrera militar en la Policía para bajar los índices de inseguridad que tiene en este municipio, pero esto ha servido de muy poco.
El régimen militar no sólo estará en Seguridad Pública, ahora Mauricio Fernández planea llevar a un militar en Dirección de Ordenamiento e Inspección, que depende del departamento de Alcoholes.
“Vamos a estar duro y dale, vamos a ser mucho más estrictos, va a ver cambios, viene de México, es un militar y viene asignado a Alcoholes, pero también vienen otros cambios.
“Voy a hacer anuncios la próxima semana de reacomodos en la Secretaría de Seguridad. Ya los había contemplado, estaba pidiendo permisos en la Secretaría de la Defensa para la gente que se va a incorporar”, aseguró el alcalde la semana pasada.
Detalló que la militarización es para evitar la venta de droga al menudeo, que es muy común en los antros de San Pedro; aunque lo cierto es que hasta ahora en ningún operativo se han detectado estupefacientes.
La llegada de militares al municipio de San Pedro no entró con el pie derecho, y para muestra cabe recordar el atentado a balazos contra el hijo del diputado por Tamaulipas de Movimiento Ciudadano, Gustavo Cárdenas.
Policías encubiertos dispararon a “matar” contra el hijo del legislador sin utilizar los protocolos para una detención, esto indignó a los sampetrinos, quienes criticaron el accionar de los policías-militares vestidos de civil.
Además, existen decenas de quejas contra un grupo integrado por policías con carrera militar y encubiertos, que irrumpe en los antros con personal fuertemente armado en busca de detectar la venta de droga al menudeo.
Pero de manera inusual, inspeccionan las bolsas de las mujeres y hacen revisión corporal a los hombres.
Esto ha sido considerado por la clientela como denigrante, pues sienten que están violando sus derechos humanos.
Esto ocurrió el año pasado durante tres fines de semana en el bar Mandela, ubicado sobre la avenida Lázaro Cárdenas en el sector Valle Oriente, y aún se realiza de manera hermética.
Estrategia de riesgo
Dueños de restaurantes y bares de San Pedro consultados por Reporte Indigo aseguran no ver con buenos ojos la llegada de un militar a la dirección Ordenamiento e Inspección, que depende del departamento de Alcoholes.
Temen que pudiera haber acciones como sembrar drogas en los antros para cerrarlos, pues aseguran que no han encontrado nada en los operativos realizados en los últimos fines de semana.
“Pues no creo que sea necesario, ya que cuando menos hasta donde yo estoy enterado los negocios han cumplido en todo lo que el Municipio ha pedido.
“Los que nunca cumplieron fueron ellos con la ampliación de una hora que está contemplada en la Ley de Alcoholes, y solo se requería de dos terceras partes del Cabildo para aprobarla”, explicó un empresario, quien pidió el anonimato por temor a represalias.
Agregó que la entrada de militares sería un riesgo constante, por la forma de operar de los mandos castrenses que no tienen tacto para negociar con la población civil.
“Me preocupa que nos vayan a terminar de acabar con los negocios, seguimos pensando que con la salida de Gabino (Martínez, exdirector de Alcoholes) se perdió mucho. Mauricio dice muchas cosas pero en ningún operativo han encontrado venta de droga, ahora bien todos sabemos que la venta fuerte de droga está en el Barrio Antiguo”, aseguró el negociante.
Competencia dispareja
Mientras que en el municipio de Monterrey los antros tienen luz verde para cerrar fuera de horario, en San Pedro están limitados cumpliendo con cerrar a las 2:00 de la mañana.
Esto ha ocasionado que los antros sampetrinos estén batallando para atraer clientela, que pueda sostener los negocios de diversión nocturna.
“Me deja la impresión que quieren acabar San Pedro para trasladar a los clientes para allá”, dijo un antrero consultado por Reporte Indigo.
“¿Acaso negociaron con ‘El Bronco’ y el nuevo cártel allá en el Barrio Antiguo?”, cuestionó.
Hoy en día, antros como el Nueva Luna y la Kaprichosa operan toda la madrugada sin que sean molestados por alguna autoridad municipal de Monterrey; así lo constató este medio en un recorrido realizado durante tres fines de semana seguidos.
Según los meseros de los antros, aseguran que arreglaron con el alcalde Adrián de la Garza, quien les pidió 80 mil pesos para operar toda la madrugada.
“Están pidiendo hasta 80 mil pesos mensuales de moches para dejarnos trabajar. Todo es un plan entre los alcaldes y el gobernador para sacar lana a los negocios y dejar operar al cártel en turno en Monterrey, te lo puedo asegurar”, dijo el informante.