Sociedad civil pide ayuda para migrantes de caravana
A los centroamericanos que buscan refugio en Estados Unidos, se han sumado mexicanos que huyeron de la violencia que azota a sus comunidades de origen
Imelda GarcíaGrupos de la sociedad civil en la ciudad de Tijuana, Baja California, han lanzado una voz de auxilio para poder ayudar a los centroamericanos que han llegado a la localidad como parte de la Caravana Migrante.
Decenas de personas han acampado en la zona de El Chaparral, último punto antes de pasar a Estados Unidos, esperando ser recibidos por las autoridades norteamericanas para solicitarles asilo.
A ellos se suman un grupo de mexicanos que se encuentra en ese cruce fronterizo, que han huido de la violencia en sus entidades y buscan ser admitidos en Estados Unidos.
Integrantes de varios grupos de la sociedad civil han apoyado a estas personas con casas de campaña, ropa, comida o medicamentos y han pedido a la población que los auxilie también con trabajo voluntario.
El Comité Estratégico de Ayuda Humanitaria Tijuana, una de las organizaciones civiles que respondió a la crisis por la llegada de migrantes haitianos a esa ciudad en el 2016, llamó ahora a conjuntar esfuerzos para apoyar a los migrantes que están a la espera de asilo en Estados Unidos.
“De acuerdo con las personas que están al frente de la caravana, el grupo formado por alrededor de 200 familias y personas de todas las edades, incluye aproximadamente 100 niños, niñas y bebes, que se encuentran esperando a la intemperie.
“Requieren de apoyo con asistencia médica, baños portátiles, ropa caliente, cobijas y alimentos, por lo que se hace un llamado a la sociedad civil para sumar voluntades”, señalaron los ciudadanos en un comunicado.
El Comité afirmó que organizaciones como “Enclave Caracol” y el proyecto “Tijuana Comida, No Bombas”, son quienes han estado alimentado al grupo.
Han participado también las organizaciones “Espacio Migrante”, “Pueblos sin fronteras”, que son parte de los organizadores de la Caravana, así como representantes de la organización “Al Otro lado” y “Border Angels”, entre otros.
“Es importante mencionar que además de la caravana migrante hay un grupo numeroso de familias mexicanas provenientes de estados como Guerrero y Michoacán, que también huyendo de la violencia buscan el asilo político y que tienen más de 10 días viviendo a la intemperie”, expusieron.
Al igual que como ocurrió con la llegada masiva de migrantes de Haití, algunas iglesias de la localidad han ayudado a quienes buscan asilo.
Las autoridades municipales han llamado a los migrantes que vayan a los refugios, pero ellos se han negado a abandonar el cruce fronterizo.
Hasta este martes eran 25 personas quienes habían sido admitidas por autoridades de Estados Unidos para solicitar asilo.