Sus años de feliz romance

Ahí está con la cara sonriente compartiendo con Israel Vallarta y sus padres una generosa comida; se le ve feliz acostada en una hamaca mientras su entonces novio la carga; comprando artesanías; tomando buenos vinos y jugando billar.

Los recuerdos de Florence Cassez en México quedaron registrados en innumerables fotografías que fueron decomisadas en diversos operativos de la Policía Federal y Ministerio Público en el rancho “Las Chinitas”, donde convivió con Israel Vallarta, líder de la banda de secuestradores “Los Zodiaco”.

Icela Lagunas Icela Lagunas Publicado el
Comparte esta nota
Para muestra, varias fotografías. Florence disfrutó de muchos privilegios y comodidades al ser pareja de Israel Vallarta. Viajes, compras, diversión

Ahí está con la cara sonriente compartiendo con Israel Vallarta y sus padres una generosa comida; se le ve feliz acostada en una hamaca mientras su entonces novio la carga; comprando artesanías; tomando buenos vinos y jugando billar.

Los recuerdos de Florence Cassez en México quedaron registrados en innumerables fotografías que fueron decomisadas en diversos operativos de la Policía Federal y Ministerio Público en el rancho “Las Chinitas”, donde convivió con Israel Vallarta, líder de la banda de secuestradores “Los Zodiaco”.

“Conocí de México lo peor y lo mejor”, dijo como parte de la conferencia que ofreció emocionada al llegar a su tierra natal, Francia, donde fue recibida en París de manera especial por el gobierno galo.

Y es que mientras en Francia la percepción de Florence es que su destino lo marcaron las malas personas e influencias con las que convivió; en México deja una estela de dudas y enojo.

Las fotografías no mienten. Cassez disfrutó de muchos privilegios y comodidades al ser la novia de Israel Vallarta. Viajes, compras, diversión.

También se beneficiaron sus padres, Charlotte y Bernard, quienes también aparecen sonrientes compartiendo vino y comida, en diferentes ocasiones, con el peligroso secuestrador capturado y preso en el año 2005.

La melena pelirroja y el rostro de aquella Florence de los años felices, dista mucho de la que se observó durante el proceso de entrega a las autoridades migratorias y policiacas que la custodiaron hasta abordar el vuelo que la llevó a Francia.

Atrás dejó el México bárbaro que conoció.

El plan de libertad

Los trámites para la entrega de Florence a sus padres y a las autoridades francesas fueron prolongados, pero ella siempre mostró temple. No derramó ni una lágrima cuando supo el veredicto de la SCJN

El gobierno del Distrito Federal consumó el operativo de su entrega de manera limpia, sin contratiempos.

Desde su oficina, el secretario de Gobierno, Héctor Serrano, se coordinó con la titular de las cárceles en la capital, Celina Oceguera, a fin de que Florence fuera entregada sana y salva a su padre y autoridades de Francia.

La tarde-noche del miércoles pasado la segunda consejera de Asuntos Políticos de la embajada de Francia en México, Anne Suard, acudió a la oficina del encargado de gestionar la liberación de Cassez, el secretario Serrano, para entregarle un documento en su mano donde le pedían garantizar la seguridad y condiciones óptimas para su traslado al Aeropuerto Internacional Benito Juárez de la Ciudad de México.

Así se hizo.

Los trámites para su entrega fueron prolongados. Personal del penal de Tepepan, Xochimilco, entregó a las autoridades francesas y sus abogados un reporte médico en el que constaba las condiciones de salud que hasta ese momento presentó Cassez.

Durante todo el proceso la francesa mostró temple. No derramó ni una lagrima ni cuando la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN) hizo público el fallo que le otorgó la libertad, proceso que ella siguió con atención en compañía de su padre en un monitor de la dirección de la cárcel.

Cuando se supo libre, Florence acudió a su celda y “heredó” a internas amigas las escasas propiedades que tenía al interior del centro de reclusión, con excepción de una colección de peluches que a lo largo del proceso le regalaron distintas visitas.

Esos los acomodó en una bolsa de plástico y los trajo consigo junto con un folder rojo donde almacenaba papeles. Lo demás ya es historia.

Adiós o hasta pronto

El gordo expediente de su caso está ahí con las versiones auténticas o encontradas de los testigos, quienes aseguran que ella fue secuestradora y parte de la banda de “Los Zodiacos”.

La activista Isabel Miranda de Wallace, presidenta de “Alto al Secuestro” no pudo contener la frustración de la libertad otorgada a Florence Cassez la noche del miércoles.

Recriminó a la Suprema Corte y le hizo coro una de las principales víctimas que acuso a Florence, Ezequiel Elizalde, quien acudió a las instalaciones de la SCJN en compañía de Wallace y del abogado Samuel González Ruiz, quien ha acompañado a ambos durante este proceso.

Los tres asumieron el fallo como una derrota: “perdimos”, dijo la activista.

Noroña tuitea: sus mails son veraces

Adiós Florence, adiós. Tras su partida la francesa deja una abierta división entre quienes la amaron y defendieron, pero también quienes la odiaron y hundieron.

Uno de ellos, el ex diputado federal Gerardo Fernández Noroña, quien desde su cuenta de twitter aceptó todo lo publicado por Reporte Indigo respecto al apoyo incondicional a Florence y las facilidades que le otorgó para que sus padres pudieran llamarle a diario por teléfono al penal de Tepepan, Xochomilco. Él es tal vez uno de los mexicanos a los que Florence se refirió cuando agradeció tantos apoyos. 

El polémico ex perredista, a su manera, defendió el caso y en su momento reclamó a Genaro García Luna el montaje y el show que hizo de esta historia.  De lo bueno y malo que vivió Cassez en la Ciudad de México libre y tras las rejas. Ya todo es historia.

Síguenos en Google News para estar al día
Salir de la versión móvil