Todo detenido
Las nuevas políticas del gobierno del Distrito Federal (GDF) en torno al crecimiento de la mancha urbana están atoradas. Ya pasaron dos meses desde el cambio de administración y las propuestas siguen en el imbo.
Todo a pesar de que el nuevo titular de la Secretaría de Desarrollo Urbano y Vivienda (Seduvi), Simón Neumann, considera imperativo que la Ciudad de México siga creciendo de manera vertical.
Antes de la llegada de Neumann, ya existía un cúmulo de programas parciales y delegacionales de Desarrollo Urbano con más de 10 años de antigüedad.
Jonathan VillanuevaLas nuevas políticas del gobierno del Distrito Federal (GDF) en torno al crecimiento de la mancha urbana están atoradas. Ya pasaron dos meses desde el cambio de administración y las propuestas siguen en el imbo.
Todo a pesar de que el nuevo titular de la Secretaría de Desarrollo Urbano y Vivienda (Seduvi), Simón Neumann, considera imperativo que la Ciudad de México siga creciendo de manera vertical.
Antes de la llegada de Neumann, ya existía un cúmulo de programas parciales y delegacionales de Desarrollo Urbano con más de 10 años de antigüedad.
El atorón se debe a que los diputados locales afines a la administración mancerista enfrentan una amplia oposición, que incluye a legisladores de su mismo partido.
Por eso hay más de cinco nuevos lineamientos en materia de uso de suelo que ni siquiera han sido discutidos en la Asamblea Legislativa del Distrito Federal (ALDF) ni en la Seduvi.
La propuesta
Para el nuevo gobierno es necesario edificar un promedio de 40 mil viviendas al año, las cuales deben ponderar densidades razonables y el acceso a servicios básicos.
Según las declaraciones de Neumann a la prensa, el crecimiento de la capital debe darse de manera ordenada y vertical, principalmente en sitios industriales.
En sus primeros días, el nuevo gobierno prepara un plan de desarrollo estratégico, que incluye la accesibilidad a medios de transporte público eficaz así como servicios.
La propuesta contempla que los nuevos edificios sean de uso mixto. Lo cual significa que quienes habiten en complejos habitacionales puedan tener ahí mismo todos los servicios primarios.
Pero para todo esto se requieren cambios a usos de suelo, tema que se ha convertido en el dolor de cabeza de los capitalinos, quienes han tenido que modificar algunos de sus hábitos ante la aparición de nuevos edificios.
Las complicaciones
La propuesta de Neumann puede ser benéfica. Sin embargo, es un asunto que tendrá que contar con el aval de la Asamblea Legislativa del Distrito Federal y ahí no hay pies ni cabeza.
Y es que la pugna de poder entre el grupo de René Bejarano y el jefe de gobierno capitalino, Miguel Ángel Mancera, ha ocasionado que el PRD pierda el control de la agenda citadina.
Por eso el PAN y el PRI se han convertido en una oposición difícil de controlar. Y en consecuencia, no se ha podido avanzar en temas como Desarrollo Urbano y Vivienda.
Hasta el momento está pendiente de modificar el Plan Parcial de Polanco, así como el de la colonia Nochebuena y Nápoles; también el de Tacubaya, Cerro de la Estrella y Santa Catarina.
Igual sucede con el Plan Delegacional de Desarrollo Urbano de Cuajimalpa.
En teoría, todos los involucrados aseguran que hay avance, pero en la práctica solo se echan la bolita mientras los desarrolladores continúan edificando nuevas obras.
Se prevé que las negociaciones entre los grupos de poder y los entes públicos se retomen la próxima semana, pero mientras los conflictos en el PRD no acaben, difícilmente avanzarán en estos temas.