A trabajar en medio de la ‘guerra’
Los senadores del PAN comenzaron los trabajos de su reunión plenaria en medio de una guerra interna entre maderistas y calderonistas.
Reunidos en un hotel de lujo de Cabo San Lucas, los senadores del albiazul se preparan para discutir los temas que tratarán en el último periodo ordinario de sesiones de esta Legislatura.
En un ambiente enrarecido por las confrontaciones internas, los senadores se reunirán con funcionarios del Gobierno Federal para discutir los temas de su agenda e intentarán cicatrizar, al menos por unos días, sus diferencias.
Imelda GarcíaLos senadores del PAN comenzaron los trabajos de su reunión plenaria en medio de una guerra interna entre maderistas y calderonistas.
Reunidos en un hotel de lujo de Cabo San Lucas, los senadores del albiazul se preparan para discutir los temas que tratarán en el último periodo ordinario de sesiones de esta Legislatura.
En un ambiente enrarecido por las confrontaciones internas, los senadores se reunirán con funcionarios del Gobierno Federal para discutir los temas de su agenda e intentarán cicatrizar, al menos por unos días, sus diferencias.
El enfrentamiento se da en dos trincheras, pero con adversarios en común: Juan Molinar Horcasitas, hoy uno de los más allegados colaboradores de Gustavo Madero, contra el expresidente Felipe Calderón y sus cercanos.
Producto del enfrentamiento entre ambos grupos, los maderistas impulsan la expulsión del partido del senador Javier Lozano por sus declaraciones contra Gustavo Madero.
Para el senador Ernesto Cordero, uno de los más allegados a Felipe Calderón, la solicitud de expulsión contra Lozano representa una falta de tolerancia a la forma de pensar distinta de los militantes de Acción Nacional.
“Es una evidencia más de la actitud autoritaria de Madero como presidente del PAN. Es una actitud autoritaria que hemos denunciado y hemos sufrido los militantes del PAN desde hace meses, hace ya casi años. No nos debe sorprender lo poco tolerante que es a la crítica, lo poco tolerante que es para escuchar opiniones contrarias a la suya.
“Es una pena, eso debilita más al partido. Es una señal más de que tenemos la razón quienes hemos denunciado el autoritarismo de Madero”, dijo en entrevista.
Roberto Gil Zuarth, otro de los senadores del grupo cercano a Felipe Calderón, sostuvo que Javier Lozano ha hecho uso cabal de su libertad de expresión y se ha manifestado contra las acciones de una dirigencia que ha tomado malas decisiones.
“(La solicitud de expulsión) es el mejor síntoma de que a esta dirigencia no le gusta el debate, no le gusta la crítica, de que esta dirigencia reacciona con agresividad hacia quienes pensamos diferente.
“Esta solicitud de expulsión refleja la altitud de miras y el sentido de Estado que tiene la dirigencia nacional. Así gobiernan: con amenazas y tratando de infligir miedo”, sentenció Gil.
El legislador lamentó que sea así como el dirigente nacional, Gustavo Madero, quiera imponer su idea de partido y no lo haga a través del debate y la confrontación de ideas.
Jorge Luis Preciado, coordinador de la bancada del PAN en el Senado, sostuvo que serán los órganos internos del partido los que procesarán la solicitud de expulsión de Lozano y, mientras tanto, la agenda del Senado se desarrolla de forma independiente.
Sin embargo, no es lo mismo si se trata del intercambio epistolar entre Molinar y Calderón.
Para Preciado, ambos personajes deberían arreglar sus diferencias en privado y no perjudicar al partido en pleno proceso electoral.
“Esto no ayuda al clima que queremos generar, que es que el PAN gane las elecciones. Yo los invitaría a que veamos por la unidad del partido”, afirmó Preciado en entrevista.
Desde la llegada a Los Cabos, el coordinador de los senadores del albiazul se mostró conciliador con senadores de ambos grupos. A ratos, discutía con unos y otros intentando que la agenda del Senado no se viera contaminada por los problemas del partido.
Entre algunos senadores de Acción Nacional se califica como un error que el expresidente Felipe Calderón haya entrado en una pelea pública con Juan Molinar.
Consideran que Calderón no debió responder a las acusaciones de Molinar y “se rebajó” al hacerlo, pues se trata de un expresidente de la República discutiendo con quien fuera parte de su equipo.
Otros senadores lamentan que se haya utilizado a Molinar Horcasitas para comenzar un ataque contra el expresidente de la República, a pesar de que el primero se encuentra en un estado muy deteriorado de salud.
Sin embargo, aunque sus posturas sean encontradas, los senadores de ambos grupos conviven y hacen política al abrazarse y saludarse con efusividad, aunque no compartan sus puntos de vista.
Este jueves, el presidente del PAN, Gustavo Madero, acudirá a inaugurar los trabajos de la plenaria panista y se encontrará cara a cara con Javier Lozano.