Ocho meses tuvieron que pasar para que Eleazar Hernández, conocido como Rayito por sus seres queridos, pudiera regresar a Culiacán, Sinaloa. Su madre lo buscaba desde que fue golpeado y desaparecido por desconocidos en el municipio de Ciudad Guzmán, Jalisco, el 16 de diciembre de 2017.
Su historia ha tenido eco en los últimos días. Es la de un joven desaparecido que logró ser identificado por el trabajo coordinado de los colectivo Por Amor a Ellxs, de Jalisco; y Sabuesos Guerreras, de Sinaloa, luego de obtener información sobre un cadáver con las mismas características que Rayito.
Pero la de Rayito también es la historia de cientos de cadáveres que hoy siguen sin ser identificados en el Instituto Jalisciense de Ciencias Forenses (IJCF), dependencia que ha visto rebasadas sus tareas e infraestructura para dar resguardo a los mismos.
Rayito fue llevado al Servicio Médico Forense el 19 de diciembre, tres días después de haber sido desaparecido. Cuando lo encontraron no pudieron identificarlo y lo mantuvieron por meses en un tráiler refrigerado, para enviarlo en mayo pasado a una fosa común.
El jueves 13 de septiembre el cuerpo del joven regresó a su hogar, para tranquilidad de su madre y sus seres queridos. Sin embargo, otros cientos rondan por la Zona Metropolitana de Guadalajara. No han corrido la misma suerte de Rayito de poder ser sepultados por sus familias.
En los últimos días diversas dependencias y niveles de gobierno se han pasado la bolita sobre la responsabilidad del resguardo de los cientos de cuerpos que debe revisar el Instituto Jalisciense de Ciencias Forenses (IJCF). Son al menos 157 cuerpos en un tráiler refrigerado que ya fue instalado en un espacio de la Fiscalía General de Jalisco
Las autoridades responsables de atender los registros forenses se han visto rebasadas ante la proliferación de fosas y cuerpos extraídos de las mismas. La alta cantidad de cuerpos que recibe el IJCF llevó al diseño de un proyecto para ampliar las criptas forenses de cuerpos que no han podido ser identificados.
Con un monto de 7.5 millones de pesos, la dependencia estatal pretendía construir criptas para albergar a cerca de 800 cadáveres, frente a un déficit existente en donde el IJCF sólo puede resguardar 300 cuerpos sin identificar, pero los espacios han llegado a tope.
Ante la falta de espacios, incluso en la Morgue que tiene Ciencias Forenses en las avenidas Lázaro Cárdenas y Batalla de Zacatecas, y frente a la oposición de los vecinos de Tonalá; las autoridades debieron conseguir un tráiler refrigerado para resguardar algunos de los cuerpos que requieren de los trabajos forenses.
Posterior a estas acciones, vecinos de la colonia La Duraznera, en Tlaquepaque, se quejaron ante el municipio debido a que el tráiler refrigerado se encontraba en una bodega de dicha colonia. Por lo que la alcaldesa del municipio exhortó al gobierno a retirar el vehículo que causaba inconformidad a los habitantes cercanos a la zona.
Destituyen a titular del IJCF
Luego de la polémica e indignación que causó el traslado de los cuerpos en el tráiler refrigerado, el gobernador del estado, Aristóteles Sandoval, anunció medidas para reparar el daño, entre las que expresó la destitución del titular del Instituto Jalisciense de Ciencias Forenses, Luis Octavio Cotero Bernal.
De acuerdo con el mandatario, las fallas en los protocolos para mover los cuerpos fueron una grave omisión. Esto lo dio a conocer la tarde de este lunes, al realizar la Mesa Permanente de Coordinación y Seguridad Pública Metropolitana.
“Es claro que hubo omisiones graves que deben ser sancionadas. Es evidente que quienes estuvieron a cargo del procedimiento de traslado alteraron el protocolo sin dar aviso a sus superiores jerárquicos. Por lo pronto, he solicitado la remoción del cargo, que se separe de inmediato el titular”, anunció Sandoval Díaz.
El titular del Ejecutivo también explicó que el tráiler tendrá que regresar a las instalaciones de ciencias forenses. Esto a pesar de que días antes el titular del IJCF declarara que el cuidar de los cuerpos no era su tarea, pese a la normativa del instituto a su cargo.
Según datos de la Comisión Nacional de Derechos Humanos sobre fosas clandestinas indican que Jalisco se encuentra entre las entidades con más fosas localizadas entre enero de 2017 y agosto de 2018, con una cifra de 14 de estas excavaciones, donde se han exhumado 126 cuerpos.
Familias exigen trato digno
El tráiler con 157 cuerpos sin identificar ha causado la indignación de grupos que buscan a sus desaparecidos, como el colectivo Por Amor a Ellxs, pieza clave en las últimas semanas en Jalisco para identificar cuerpos a partir de su trabajo de registro público sobre información que obtienen del Servicio Médico Forense.
Un comunicado emitido la noche del domingo señala que la voluntad del Estado no alcanza para darles un trato digno a los cuerpos que debe identificar. Además de evidenciar la incapacidad humana, técnica y presupuestaria de la que es objeto el IJCF y la FGE, donde se vuelve imposible poder identificar a los cientos de cuerpos.
“Manifestamos nuestra indignación por el trato denigrante que las autoridades dan a los cuerpos de las personas que, víctimas de la violencia, han muerto en Jalisco y por la revictimización a la que nos someten a quienes buscamos a nuestros seres queridos”, dijo la organización.
Por lo cual piden obtener y transparentar la información sobre los datos forenses de los cadáveres o resto de personas identificadas y no reclamadas, la recolección de muestras necesarias para que sean ingresadas al Registro Nacional de Personas Fallecidas y No Identificadas, así como el cumplimiento en los objetivo del Programa Nacional de Búsqueda.