Luego que el obispo guerrerense Salvador Rangel señaló este domingo haberse reunido con un grupo de criminales para acordar un alto al asesinato de candidatos, el secretario de Gobernación, Alfonso Navarrete Prida, aseguró este lunes que la aplicación de la ley no se negocia.
El funcionario aseguró que las leyes deben acatarse y cumplirse, precisó que aunque desconoce el contexto exacto de la reunión dada a conocer por el religioso, ha estado en contacto con la Conferencia del Episcopado Mexicano para entender el contexto de las declaraciones.
Rangel aseguró este domingo que se reunió con una organización de narcotraficantes de la sierra de Guerrero con quienes acordó un alto al asesinato de candidatos, además señaló que el encuentro tuvo lugar el viernes pasado y fue trasladado en helicóptero al lugar.
El obispo señaló que los delincuentes pusieron como condición que los candidatos no repartan dinero para comprar votos y que cumplan con sus promesas en caso de ganar. “Lo que piden es que haya voto libre razonado y secreto”, añadió.
“Sí tenemos un problema en Guerrero, un problema de seguridad con candidatos, sí hay ejecuciones en Chilapa y sí tenemos la obligación de entrar a esos lugares y de aplicar la ley y no el uso desmedido de la fuerza”, precisó este lunes Navarrete Prida.
En declaraciones posteriores, Rangel dijo que el habla con todo mundo para mejorar las condiciones en el estado.
