El candidato presidencial de la Coalición Movimiento Progresista hará su cierre de campaña hoy al mediodía en este estado, donde desde hace 80 años gobierna el PRI
“Vamos a repetir la hazaña de hace seis años donde Andrés Manuel López Obrador triunfó con más de 100 mil votos sobre su más cercano contendiente que fue el PRI”. Así lo afirma Francisco Garduño Yáñez, representante del Movimiento de Regeneración Nacional (Morena) en Hidalgo.
El candidato presidencial de la Coalición Movimiento Progresista hará su cierre de campaña hoy al mediodía en el estado donde desde hace 80 años gobierna el PRI.
Hidalgo es una entidad federativa colmada de contrastes geográficos y sociales. Donde la alternancia política es inexistente.
En el que amplios sectores de la ciudadanía no dejan de comentar los excesos y las anomalías cometidas por el ex gobernador Miguel Ángel Osorio Chong, actual secretario de organización del CEN tricolor.
Garduño Yáñez considera que esta entidad federativa es un “cacicazgo político familiar” donde no se han modificado las condiciones económicas de los hidalguenses.
Hay vastos territorios con escaso o nulo desarrollo social y altos índices de pobreza como el Valle del Mezquital, Huejutla, Los Huastecos, Huehuetla, entre otros. Ahí “hay madres solteras abandonadas, niños con frío y hambre, bebés dispuestos en jacales sin condiciones mínimas de bienestar”, asegura el ex secretario de Transporte y Vialidad durante el Gobierno del Distrito Federal de AMLO.
En su opinion, los recorridos del tabasqueño han sido exitosos: “los hidalguenses hace seis años le dieron el voto. Obtuvo 380 mil votos y esperamos que esa hazaña se repita. Las plazas han estado concurridas”.
Narra a Reporte Indigo lo que ha atestiguado en ellas. En el mitin de Actopan, dice que más de 10 mil habitantes esperaronn bajo la lluvia al candidato de las izquierdas. En la sierra de Huejutla otros miles de indígenas atiborraron la plaza central. Lo mismo ocurrió en Tulancingo, Tula e Ixmixiquilpan.
“En estas plazas no se vacían los estadios. No se van cuando está hablando el candidato. Es gente convencida, que está en el cambio”, asegura Garduño.
El también ex subsecretario del gobierno de la Ciudad de México considera que la clase gobernante hidalguense está nerviosa. Y refiere que ya empezaron a operar “los mecanismos de cooptación y de compra de voto”. En la Huasteca han estado distribuyendo sombreros, morrales, paraguas y dando material de construcción.
El gobernador Francisco Olvera no se ha quedado atrás, apunta. Garduño comenta que se comporta como presidente estatal. “Fue a entregar 15 laptops a unasecundaria donde están en exámenes finales en Huejutla”.
Lo mismo hacen los secretarios estatales. “Ha habido vehículos detectados que han sido detenidos y se ha hecho del conocimiento de estos hechos al IFE y a la PGR, dado que son ilícitos del orden federal que trastocan la democracias y son punibles como delitos electorales”, dice el representante de Morena.
“El pueblo hidalguense está consciente que no queremos el último programa de la novela de Peña Nieto y La Gaviota, donde los gaviotos quieren vivir en el Palacio Nacional felices por el resto de sus días”.
Pasado el primero de julio se verá si Hidalgo logra dejar atrás el perpetuo reinado tricolor y por fin conquista la alternancia electoral.
Por ahora, su destino político es una incógnita.
