Acompañados de su líder nacional, Gustavo Madero, el grupo parlamentario del PAN planteó a la Comisión Permanente del Congreso de la Unión quitar al sindicato petrolero del Consejo de Administración de Petróleos Mexicanos (Pemex).
“No puede ser que en el Consejo de Administración esté sentado el sindicato”, expresó el legislador Rubén Camarillo en la presentación de la iniciativa a la reforma energética.
Los panistas plantearon excluir de las decisiones al gremio liderado por Carlos Romero Deschamps, además de crear un fondo que controle la renta petrolera que se obtendría por las concesiones que ofrezca el Gobierno a las empresas privadas.
Entre las modificaciones propuestas destaca la inclusión en el 27 constitucional de concesiones que podrá otorgar el Estado, relativas a la exploración y explotación del petróleo y demás hidrocarburos, además de las ya contempladas en la Carta Magna en materia de radiodifusión y telecomunicaciones.
El proyecto panista propone también la participación de la iniciativa privada en todos los procesos de la cadena productiva petrolera y de energía eléctrica.
Pretende abrir la producción y explotación del petróleo, gas natural, gas shale y oil shale a la iniciativa privada con el fin de terminar con el monopolio de Pemex en estas tareas, sin embargo, destaca la intención de no privatizar, sino dotar a la paraestatal de autonomía presupuestal.
Acción Nacional pretende crear un fondo, denominado Fondo Mexicano del Petróleo, que maneje los dividendos que recibirá el Estado como parte del impuesto que se le cobrará a todas las compañías por la extracción de los hidrocarburos.
“No habrá registro de reservas, sino que todo se hará a través del Fondo Mexicano del Petróleo”, comentó Camarillo, quien declinó a detallar si la propuesta abrirá la puerta a una posible salida a Bolsa de parte de las acciones de Pemex.
Por su parte, Jorge Luis Preciado, coordinador de los senadores del PAN, afirmó que con esta reforma “de gran calado”, Pemex será fortalecida con la inversión de capital privado en algunas áreas de trabajo y con el cambio en su régimen fiscal para evitar que todos los ingresos de la renta petrolera se vayan directamente al gasto nacional.
“La reforma que proponemos cambiará sin duda la vida de los mexicanos y podremos, de ser aprobada, consolidar un México muy diferente y próspero y dejaremos atrás el presente de Pemex, que técnicamente se encuentra en vísperas de la quiebra”, expuso Preciado.
Reforma política, la condición
Acción Nacional condicionó la discusión de la reforma energética a la previa aprobación de la reforma en materia política.
El senador panista Javier Lozano advirtió que buscará que en la reforma política se incluya la segunda vuelta presidencial, así como la reelección de alcaldes y legisladores.
“La propuesta del Pacto por México en materia política no es suficiente. No nos engañemos, con esa no vamos. Vamos con una reforma política electoral que contenga segunda vuelta para elegir al Presidente de la República y los gobernadores. Y reelección consecutiva de alcaldes y legisladores”, explicó.
Anticipó que el Partido de la Revolución Democrática (PRD) no se sumará a su propuesta de reforma energética, debido a los cambios constitucionales que se plantean, así como la apertura “total” que se pretende.
“No creo que vayamos a coincidir (…) Difícilmente ante tanto prejuicio que hay del otro lado vamos a poder ponernos de acuerdo en una posición intermedia”, dijo Lozano.
Habrá debate
El coordinador parlamentario del PRI en el Senado de la República, Emilio Gamboa Patrón, celebró la presentación de esta propuesta, para inmediatamente después adelantar que la próxima semana el presidente Enrique Peña Nieto presentará su iniciativa para entonces abrir un amplio espacio de análisis y discusión de sendas propuestas.