[kaltura-widget uiconfid=”38728022″ entryid=”1_5dueepfl” responsive=”true” hoveringControls=”false” width=”100%” height=”75%” /] La Máxima Casa de Estudios es una olla de presión a punto de estallar.
En plena transición, a menos de un mes de que se conmemore el 50 aniversario de la matanza de estudiantes del 2 de octubre y a tres meses de que el presidente electo Andrés Manuel López Obrador asuma el poder, la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM) enfrenta uno de sus momentos más tensos.
Un conflicto que estalló la semana pasada en el Colegio de Ciencias y Humanidades (CCH) Plantel Azcapotzalco –por irregularidades administrativas y falta de maestros asignados que provocó que la directora de ese campus renunciara a su cargo–, se convirtió en un movimiento al que se habían unido hasta ayer casi 40 escuelas a través de paros de 48 y 72 horas e indefinidos.
La situación escaló este lunes 3 de septiembre cuando varios grupo de personas organizados y armados con palos, piedras, bombas molotov y armas punzo-cortantes –presuntos porros– agredieron a estudiantes del CCH Azcapotzalco y de otros planteles de la Universidad que se manifestaban en la explanada de la Rectoría de forma pacífica, en Ciudad Universitaria.
Por las agresiones, algunos estudiantes resultaron con heridas menores, pero dos alumnos, Emilio Aguilar Sánchez, de la Escuela Nacional Preparatoria (ENP) No. 6; y Joel Meza García, de la Facultad de Filosofía y Letras, terminaron con lesiones severas. Aunque fueron atendidos, su estado es grave y se encuentran bajo observación médica, según el último reporte de la Universidad.
Inmediatamente y como un efecto dominó, escuelas de la UNAM celebraron asambleas estudiantiles en las que decidieron qué acciones emprender y hasta ayer los 5 CCH´s, las 9 ENP, las 5 Facultades de Estudios Superiores (FES) de la zona metropolitana; 15 facultades; 3 escuelas nacionales; y el área de Posgrados, se sumaron al paro de labores en repudio a la agresión a estudiantes por parte de los grupos porriles en Ciudad Universitaria.
De no atenderse, este conflicto podría convertirse en el primero que le toque enfrentar al presidente electo, Andrés Manuel López Obrador, quien ya fue cuestionado al respecto por una joven quien se identificó como alumna de Antropología, de la UNAM
“No debe haber violencia, es lo que opino. Mucho menos auspiciada por gente que mantiene intereses”, respondió el tabasqueño.
La jefa de gobierno electa de la Ciudad de México, la morenista Claudia Sheinbaum, reprobó las agresiones por presuntos grupos porriles a los estudiantes del CCH Azcapotzalco en la explanada de la Rectoría, en Ciudad Universitaria, y pidió que se investigue a quienes pudieron auspiciar a los agresores, además de que dejó en claro que respetará la autonomía de la Universidad.
“Los grupos porriles están auspiciados, lo que hay que definir es de dónde vino la provocación y eso es lo que tiene que investigar la PGR”, dijo.
“El que no brinque es porro”
Alumnos de distintas facultades del Campus Central salieron a marchar el día de ayer hacía la torre de Rectoría para exigir un alto a la violencia generalizada por la que atraviesa la comunidad, pero no fueron recibidos.
Tomados del brazo, de la mano, o simplemente formados unos tras otros, cerca de 800 estudiantes avanzaron por los pasillos y pastos de la Ciudad Universitaria, y urgieron al rector de la Universidad una pronta solución a sus demandas.
El contingente incluyó a alumnos de las facultades de Ciencias Políticas y Sociales (FCPyS), Filosofía y Letras, Economía , Psicología, así como del Centro Universitario de Estudios Cinematográficos, entre otros planteles.
“En la Facultad de Ciencias Políticas y Sociales acordamos entrar en paro hasta el día viernes por la falta de respuesta de las autoridades a nuestra demandas, luego nos enteramos de que el rector Enrique Graue declaró a medios que no había ninguna movilización estudiantil, que CU estaba en calma y ello es completamente falso, por lo que decidimos movilizarnos”, explicó Rodrigo Guillot, dirigente de la asamblea estudiantil de la FCPyS.
Dijo que se pide determinar quiénes son los culpables y cuáles fueron sus motivos, así como una solución integral a los problema de seguridad.
Al grito de “¡Fuera porros de la UNAM” y “El que no brinque es porro”, e l contingente se movilizó de la explanada del edificio de Rectoría a la zona conocida como “Las Islas”, esto debido a que no se descartaba una agresión porril durante la manifestación.
Aunque en distintas asambleas se discutiera el tema de ‘formar autodefensas’, el líder estudiantil dijo aún no hay nada acordado y que cada escuela o facultad lo iba a determinar
“Mañana vamos a marchar y a realizar un mitin también para visibilizar el movimiento estudiantil, para recordarle a Rectoría que aquí seguimos, que no nos vamos a mover y que no vamos a claudicar en nuestra lucha, además de que es un evento previo rumbo a la asamblea a nivel interfacultades que tendrá lugar el viernes”, señaló.
Por su parte, el profesor Mario Benítez, de la Facultad de Economía, manifestó que las autoridades universitarias convocaron con sus pésimas decisiones a que el estudiantado despertara y que ahora las mimas tendrán de que enfrentarse a lo que venga.
“Nosotros no queremos que nos agredan o roben, porque lo que pedimos es educación gratuita para todo el pueblo. Queremos justicia, comedores, becas, salarios dignos, no más corrupción y sobre todo seguridad”, manifestó el académico.
¿Y el rector?
Enrique Graue Wiechers, rector de la UNAM, informó en un comunicado y luego en un video que ya identificaron a por los menos tres grupos porriles que participaron en la agresión del lunes.
Dio a conocer que firmó la expulsión definitiva de 18 personas inscritas en la Universidad y notificó que el caso es investigado por la Procuraduría General de Justicia (PGJ) de la Ciudad de México.
Manifestó que la UNAM no descansará hasta ver totalmente erradicadas a dichas asociaciones.
La misteriosa ruta del camión de los porros a CU
Por Icela Lagunas
Como parte de las investigaciones para esclarecer la violencia registrada en la UNAM, la Procuraduría General de Justicia de la Ciudad de México analiza un video captado por las cámaras del C5 en el que se observa como un autobús blanco transporta al grupo de presuntos porros a las instalaciones de la UNAM.
Por lo que se aprecia en las imágenes, el camión fue enviado explícitamente para recoger al grupo de jóvenes e ingresarlos a Ciudad Universitaria para detonar la violencia.
La unidad es captada por primera vez en las cámaras del C5 a las 13:13 del 3 de septiembre en el Periférico Norte a la altura de Lomas de Sotelo, en inmediaciones con el Estado de México.
La unidad es captada circulando por el segundo piso del Periférico a la altura de Palmas a las 13:15 horas hasta avanzar hasta San Jerónimo.
A las 13:30 horas es detectado ya cargado de seudo “alumnos” en el punto San Jerónimo-Aguas y a las 13:39 horas se ve en las inmediaciones de Ciudad Universitaria, 10 minutos después, las cámaras del C5 capitalino al hacer un acercamiento permiten apreciar que los ocupantes portan los “Jerseys” con la leyenda UNAM en la parte trasera.
Desde las 13:50 se pierde la pista del autobús, mismo que vuelve a ser detectado hasta las 14:36 en el Eje 10.
Alrededor de las 16:00 horas se observa el mismo autobús de regreso por Periférico y Avenida Toluca. Finalmente, en la misma vía con dirección al Norte, con salida al Estado de México.
Como parte de las pesquisas que realiza la PGJDF, indaga el propietario del Tag con el que dicho autobús puedo acceder al segundo piso del Periférico.
