Vacío de autoridad provoca justicia por mano propia
En el país solo el uno por ciento de los delitos que se cometen se resuelve, lo que desincentiva la denuncia y la confianza en policías, ministerios públicos y jueces, además de provocar que la ciudadanía busque otras formas de acceder a la justicia
Eduardo BuendiaLos mecanismos de seguridad e impartición de justicia en México son inservibles, así lo muestran las escasas sanciones a los delitos que se cometen en el país.
Cifras de la Encuesta Nacional de Victimización y Percepción sobre Seguridad Pública (ENVIPE), elaborada por el Inegi, muestran que en el año 2018, de los 33 millones 035 mil 090 actos ilícitos ocurridos, solo se denunciaron 3 millones 497 mil 467, es decir el 11 por ciento.
Del universo de delitos que tuvo conocimiento la autoridad, solo el uno por ciento se resolvió, esto significa que en 432 mil 413 casos los afectados recuperaron sus bienes, se reparó el daño, el responsable fue presentado ante un juez o se le otorgó el perdón.
Los pocos resultados en materia de justicia desincentivan a los ciudadanos a denunciar ante las autoridades que fueron víctimas de algún ilícito, además de que genera un resentimiento social y la búsqueda de acciones más efectivas para enfrentar a la delincuencia como lo exhiben los videos difundidos en redes sociales de personas golpeando a otras por delinquir, menciona Felipe Gaytán.
La impunidad en el país también provoca desconfianza de la sociedad en sus autoridades. La ENVIPE revela que tanto las corporaciones de seguridad encargadas de la protección ciudadana, ministerios públicos y jueces son vistos como entes corruptos y poco efectivos.
En el caso de las policías estatales, el 38.7 por ciento de las personas encuestadas dijo desconfiar de estas instituciones, para los elementos municipales el porcentaje fue de 45 por ciento. Para ministerios públicos de 41.2 por ciento y para los jueces de 40.6 por ciento.
En cuanto a percepción de corrupción, la ENVIPE dejó al descubierto que el 68.4 por ciento de la ciudadanía percibe que los jueces son corruptos en algún grado. Le siguen la policía municipal con 67.9 por ciento, ministerios públicos y procuradurías estatales con 65.5 por ciento y la policía estatal con 64.1 por ciento.
La mala actuación de las autoridades y la poca confianza que les tiene la población deja en el desamparo a las víctimas de un delito, expresa Gabriela Ruiz.
“Nos vemos de una u otra manera indefensos, permea un sentimiento de impunidad, de inoperancia estatal, cuántas veces hemos escuchado a personas que sufren algún tipo de delito de asalto o robo y prefieren no hacer ningún tipo de denuncia porque no confían en que haya una real impartición de justicia, esto de una u otra manera se coloca como un imaginario colectivo en donde se justifican y se legitima la violencia en contra de estos presunto asaltantes”.
Las cifras del robo y la justicia
Durante el primer semestre del 2020 el robo común se redujo en casi todas sus modalidades.
La poca movilidad social y el confinamiento recomendado por las autoridades de salud debido a la pandemia del COVID-19 provocaron que se cometieran menos ilícitos en la vía pública.
Sin embargo, especialistas en materia de seguridad pública advierten que ante el desempleo masivo y la crisis económica que dejó a su paso la contingencia sanitaria, se prevé que el número de robos repunte en cuanto se reactiven todas las actividades económicas y sociales en el país.
Según datos del Sistema Nacional de Seguridad Pública (SNSP), en el primer semestre de 2020 el robo en transporte público se redujo 45 por ciento en comparación con el mismo periodo del año anterior.
En el caso de los asaltos a transeúntes en la vía pública la reducción fue del 30 por ciento, el robo a casa habitación bajó un 23 por ciento, a negocio un 22 por ciento y el de vehículo un 23 por ciento.
De enero a junio de este año se denunciaron 304 mil 065 robos, de los cuales 75 mil 357 estuvieron relacionados con el despojo de automóviles, 47 mil 467 con negocios, 31 mil 763 hurtos con casas habitación, 29 mil 855 con transeúntes en vía pública, 6 mil 249 con transporte individual y 5 mil 768 con transporte público entre otros.
Los videos que circulan en las redes sociales sobre los asaltos en transporte público son una problemática que se intensifica en el centro del país, debido a que el 88 por ciento del total de robos ocurren en el Estado de México y en la capital, además de ser los sitios con mayor número de población.
De estas dos entidades, Iztapalapa es la localidad que registró mayor número de asaltos denunciados en transporte colectivo. De acuerdo con el SNSP, en esta alcaldía hubo 454 casos en los primeros seis meses de 2020, es decir que se presentaron dos robos en promedio por día.
Ecatepec es el municipio del Estado de México con más robos en transporte con 434, le sigue Naucalpan con 399, Tlalnepantla con 283, Cuautitlán Izcalli con 234 y Nezahualcóyotl con 211.
En la Ciudad de México, debajo de Iztapalapa se encuentra Cuauhtémoc con 300 asaltos, Gustavo A. Madero con 197 y Venustiano Carranza con 137.