Ya vienen las vueltas de timón en el gabinete de NL
La administración a cargo del gobernador Rodrigo Medina se encuentra en una encrucijada: esta semana tiene que definir los giros de timón en diversas entidades del gobierno y la posible salida de algunos de sus colaboradores.
Para ajustar las tuercas del aparato gubernamental, que por su robustez cada día pesa más a las finanzas públicas de Nuevo León, Medina evaluará resultados y decidirá el futuro de ciertos integrantes de su círculo cercano.
Javier EstradaLa administración a cargo del gobernador Rodrigo Medina se encuentra en una encrucijada: esta semana tiene que definir los giros de timón en diversas entidades del gobierno y la posible salida de algunos de sus colaboradores.
Para ajustar las tuercas del aparato gubernamental, que por su robustez cada día pesa más a las finanzas públicas de Nuevo León, Medina evaluará resultados y decidirá el futuro de ciertos integrantes de su círculo cercano.
Entre las salidas más importantes que se pronostican está la del contralor del Estado Jorge Manjarrez, y la del ex vocero del presidente Ernesto Zedillo, Carlos Almada, encargado de la Oficina Ejecutiva de la Gubernatura.
También se contemplan los nombres de otros funcionarios de primer nivel, como Juan Manuel Parás, subsecretario de Gobierno, y Felipe González, subsecretario de Desarrollo Político.
Además de dos titulares de organismos descentralizados: Luis Treviño Chapa, director de la Corporación para el Desarrollo Turístico de Nuevo León, y el director de Servicios de Agua y Drenaje de Monterrey, Emilio Rangel Woodyard.
Esta última entidad es uno de los pocos bastiones de influencia que le quedan al ex gobernador Natividad González Parás.
Como parte de estos ajustes se esperan cambios en la Secretaría de Finanzas y Tesorería del Estado, encabezada por Rodolfo Gómez.
Y se prevé la llegada a la administración del ex diputado federal del PRI Eduardo Bailey, así como el ascenso de Filiberto Ceceña a la Subsecretaría de Gobierno.
En su Tercer Informe de Gobierno, el mandatario también recordó que como una de las estrategias del plan de austeridad gubernamental –conocido como Programa de Ordenamiento y Fortalecimiento Integral de las Finanzas en el Estado- está la fusión o extinción de algunas entidades.
“Consiste en la fusión o extinción de entes del Gobierno del Estado, negociaciones salariales restrictivas, implementación de políticas limitativas de compras, reducción de arrendamientos y restricción de los montos que ordinariamente se destinan a los programas de gasto e inversión”, subrayó el mandatario este miércoles.
“Al final del camino estaremos satisfechos de haber hecho lo correcto dentro de nuestro ámbito de competencia, pero representará solo un alivio parcial”, reconoció durante su intervención en el Palacio de Gobierno.
Con los anteriores cambios en el organigrama de su administración, Medina espera ahorrar hasta 530 millones de pesos durante este año, sin afectar los programas y áreas prioritarias de su gobierno, según él.
Los ajustes orgánicos vendrían después de que este lunes se cerraran las contrataciones de gobierno y la creación de nuevas plazas.