“Se brincó las trancas”. Ésta es la opinión de Alejandro Sánchez Camacho, secretario general del PRD, sobre cómo Jesús Zambrano condujo la firma del Pacto por México.
De acuerdo con el secretario general del PRD , “lo hizo en la clandestinidad” y se dejó de lado “la opinión estatutaria de la Comisión Política Nacional”.
De hecho, cuenta a Reporte Indigo que este sábado dieron una conferencia de prensa juntos y Zambrano nunca le comentó nada respecto al acto que encabezaría unas horas después.
En su opinión. el cónclave en el Alcázar del Castillo de Chapultepec supone una gran responsabilidad y coloca al Sol Azteca en una etapa complicada.
“Con estas actitudes será el presidente nacional el único responsable de que se agudicen al interior del PRD las diversas opiniones”, afirmó.
Precisa que la suya no es una opinión personal, sino institucional y diferente a lo que hizo Zambrano, “por eso digo que se brincó las trancas”.
Ayer el presidente nacional perredista dijo que asumía plenamente su responsabilidad por la firma del Pacto por México, aun a costa de la inconformidad de las corrientes en clara alusión a la Izquierda Democrática Nacional (IDN) y Alternativa Democrática Nacional (ADN), que no asistieron a la firma.
Conducta reprochable
Según Sánchez Camacho, en las próximas horas, se reunirán para evaluar “la conducta jurídica y política de Zambrano”. Insiste en que la Comisión Política Nacional del partido del sol había establecido un acuerdo para no firmar nada hasta que se celebre el Congreso Nacional del PRD.
“Esa firma es un desaliento no para la militancia ni para la izquierda, sino para los ciudadanos”, asegura.
Y confiesa que “es una lástima que no se haya dado la oportunidad para el debate”. El documento que se firmó ayer, según su versión, lo entregó Zambrano al partido el jueves por la noche,
“Y quería que nos viéramos el viernes temprano para aprobarlo… cuando él tardó en la negociación con el PRI más de dos meses”. Todo ocurrió en el momento en que el PRI y el PAN votaban la reforma laboral.
“Si estaban muy entusiastas con un acuerdo deberían haber detenido la votación de la reforma laboral, como señal de entendimiento. Sin embargo –agrega– nos avasallaron en la Cámara de Diputados y todavía así van y firman un pacto. Es una actitud desafortunada”.
¿Les preocupa que ésta se la primera acción que el PRD da tras el relevo presidencial?, se le inquiere al perredista.
“Sí, porque el PRI y Peña Nieto estaban ansiosos de una legitimidad de la izquierda, a pesar de lo vergonzoso que fueron los procedimientos para llegar a la Presidencia. A pesar de los primeros síntomas (del 1 de diciembre) de ser un gobierno represor con los muchachos del YoSoy132”.
Es en este contexto, “van y se entregan a los brazos de la derecha”, remata Sánchez Camacho.
El choque de trenes en el interior del PRD es inminente.
