Faltan tres semanas para la Copa del Mundo, pero en las calles brasileñas no cesan los encontronazos. 

Esta semana, los policías y transportistas realizaron una huelga con la que paralizaron a 13 estados de Brasil, de los que seis serán sedes mundialistas.

Ambos grupos de trabajadores exigieron mejores condiciones laborales y un reajuste salarial.

En todos estos estados, apenas 30 por ciento del total de fuerzas policiacas se presentó a trabajar, informó la prensa extranjera.

Luiz Felipe Scolari, director técnico de Brasil, no se dejó llevar por el buen paso del Atlético de Madrid en la Liga de España y en la Champions League, por lo que ninguno de los brasileños que militan en este equipo fue requerido para ser parte de la selección mundialista.

Miranda y Filipe Luís, integrantes del conjunto Colchonero, se quedaron fuera de la lista definitiva del Pentacampeón del Mundo, al igual que Ronaldinho, Kaká y Robinho.

La lista del segundo rival de México en la Copa del Mundo está integrada por los siguientes elementos:

Además de invertir más de 13 mil millones de dólares en el Mundial para construir estadios, reparar avenidas y acondicionar zonas turísticas, el Gobierno de Brasil podría estar “desapareciendo” a los niños de la calle para no dar mala imagen.

El periodista danés Mikkel Jensen denunció hace casi un mes que algunos gobiernos estatales de Brasil estaban “exterminando” a los menores de edad de las favelas. 

Los brasileños están empeñados en que el Mundial de Futbol 2014 se convierta en un autogol para la presidenta Dilma Rousseff. 

Por primera vez, las encuestas rumbo a las elecciones presidenciales del 5 de octubre muestran que la popularidad Rousseff cayó tanto, que ahora necesitaría una segunda vuelta electoral para reelegirse como jefa de Estado.

El sondeo más reciente del Instituto Sensus sitúa la intención de voto de la actual mandataria en un 35 por ciento, dos puntos menos que en la anterior encuesta del Instituto Brasileño de Opinión Pública y Estadística (IBOPE).

Países europeos siguen creyendo que en Brasil la situación está de la patada. 

Gobiernos de naciones como Alemania, Francia, España y Reino Unido emitieron alertas para los viajeros que deseen ir a Brasil antes o durante el Mundial de Futbol, que empieza el 12 de junio.

Las principales razones son las fuertes manifestaciones en las calles, los enfrentamientos entre policías y civiles, la agudización de la violencia en las favelas y los estafadores de turistas.