Andrés Manuel López Obrador tiene una tercera oportunidad de convertirse en presidente de México. Nadie garantiza que la tercera sea en la que venza, pero sin duda que la tercera será la vencida. Es ahora o nunca.
Por ello, resulta imprescindible que el tabasqueño capitalice sobre lo que tiene. Que son al menos cinco puntos de ventaja sobre su más próximo competidor que es Margarita Zavala. Estas cifras son meramente indicativas, porque en la hoguera política de nuestro tiempo, aunado a la explosión digital las encuestas, son el bien más volátil que hay.