Nadie tiene derecho a decir que se siente engañado, defraudado, quizá frustrado podría ser, después de la pelea del sábado por la noche allá en la Arena T-Mobile de Las Vegas, Nevada, entre Floyd Mayweather y Conor McGregor.
Ellos subieron al ring a realizar exactamente el combate como nos lo anunciaron, el mejor boxeador de la última década, que por cierto, no subió en su mejor forma porque ya la edad lo alcanzó, si alguien es inteligente y sobre todo el boxeador más exitoso de la historia, es el propio Floyd Mayweather.
Alfredo Domínguez Muro