Una nueva fractura se registra en el cuarto de guerra de Marcelo Ebrard. Su pupilo Jesús Valencia anunció que se separa del ex jefe de Gobierno para sumarse a las filas de Alternativa Democrática Nacional (ADN).
Se trata de una estrategia que le garantiza no entregar la jefatura delegacional de Iztapalapa –considerada la más importante en cuanto a votos se refiere– a cambio de nada.
Con ello, el Gobierno de la Ciudad tendrá que entablar una negociación con el líder de la segunda fuerza nacional del PRD, Héctor Bautista, si pretenden hacerse de ese bastión electoral.
Jonathan Villanueva