Los diputados federales buscarán modificar algunos puntos de la Ley de Ingresos para lograr rescatar los fondos discrecionales que se entregan a los municipios.

El año pasado, etiquetaron 10 mil 900 millones de pesos en tres fondos que se repartieron de forma discrecional: pavimentación, cultura y espacios deportivos.

El destino de este dinero fue decidido por los diputados sin método y solo por la voluntad de cada uno.

La tónica de la política de ingresos aprobada ayer por senadores para 2014 será de más deuda y menos ingresos.

Apenas se recuperaban los ánimos de la trasnochada sesión de la Cámara de Senadores, luego del fast track legislativo que utilizaron PRI y PRD para aprobar -ante la ausencia aceptada del PAN- la miscelánea fiscal de la reforma hacendaria, cuando, ya con la fracción panista, inició en la Cámara Alta la discusión de la Ley de Ingresos.

A los legisladores mexicanos los unió la idea de que el próximo año el país tenga más dinero. 

Con proyecciones que pudieran errar en el futuro, aprobaron como nunca antes la Ley de Ingresos para el año 2013.

Es un hecho sin precedentes. Nunca en tan poco tiempo habían los legisladores logrado un acuerdo de esa naturaleza que implica que México tendría para el siguiente año un total de 3 billones 956 mil 361. 6 millones de pesos.

Hubo cierto jaloneo por parte de los partidos de izquierda, pero para nada como el de años anteriores.