Existe una tendencia, conocida en Estados Unidos como “no-poo”, que consiste en dejar de utilizar el shampoo convencional para el lavado del cabello. De hecho, hay quienes presumen de no utilizar este producto en varios meses, e inclusive un año.
Sin embargo, esto no significa dejar el cabello sucio, sino reemplazar el shampoo convencional por productos más naturales, entre los que destacan el bicarbonato de sodio y el vinagre de manzana.
Dolores González