La comunicadora Sanjuana Martínez atribuye su detención a una venganza de la juez Luz María Guerrero, a quien un día antes había denunciado por corrupción ante el Consejo de la Judicatura de Nuevo León.
“Fue una venganza, evidentemente, una venganza consumada de manera muy aparatosa, porque la forma en que me detuvieron fue verdaderamente espectacular, son métodos que sólo se utilizan contra los capos del narcotráfico”.
Martínez, quien se califica como una periodista “incómoda”, fue detenida el pasado 5 de julio en un operativo encabezado por la juez de lo familiar.
Javier Estrada