El plan para el desarrollo urbano de San Pedro está entrampado: por un lado piden su revisión y por otro su aprobación lo antes posible.
Así como promovieron suspensiones de amparo para detener el Plan 20-30, hay intereses de que se apruebe.
Entre las presiones para que esta regulación se convierta en ley se incluye al ex munícipe sampetrino Mauricio Fernández.
Y entre los impulsos para que se reconsidere el Plan 20-30, que regula los porcentajes y destinos del suelo en el municipio, están el desarrollador Grupo Inmobiliario Monterrey (GIM).
Hugo Gutiérrez