
El aumento en el número de casos por coronavirus provocó que locatarios de la Central de Abastos comenzaran a cerrar sus bodegas, la decisión ha afectado a miles de comerciantes que dependen de las frutas y verduras para abastecer los mercados locales. Se espera que en las próximas dos semanas las hortofrutícolas comiencen a escasear y los negocios a cerrar