De ser el “presidente más pobre del mundo”, pasará a ser padre adoptivo de por lo menos 40 niños y jóvenes, a quienes les enseñará a trabajar la tierra.
Es la última novedad del siempre controvertido mandatario uruguayo Pepe Mujica.
Días después de aprobar la ley que regula y legaliza la mariguana, “el jefe de Estado dijo a un periodista del diario El Observador que piensa concretar su deseo después de que se saque ‘el sayo’ que le pesa, en alusión al mandato presidencial”, informó ayer El Nuevo Herald.
Indigo Staff