Más que un jugador, Carlos Fierro se ha convertido en el arma letal de Chivas. Su polémica por ser catalogado casi como un tramposo ha despertado el cuidado en las defensas, en especial a la del Cruz Azul.
Previo al duelo contra La Máquina en el estadio Azul, Chivas está inmerso en un lío de Fair Play. Primero porque ya fue sancionado por esta causa y ahora porque en Copa MX fue beneficiado.
Fierro, de 20 años, ha entrado al juego escabrozo de la duda donde su reputación está en juego. Pese a todo, en Cruz Azul lo respetan, según comentó Francisco Rodríguez.
“No me fijo si voy a enfrentar a un jugador que por ahí va a engañar al árbitro. Nosotros confiamos en el arbitraje.
“Él es un gran jugador, pero no puedo hablar de él. Es opinión de ustedes cómo lo etiqueten. Yo me dedico a mi equipo y a hacer bien las cosas”, dijo el “Maza”.
Cruz Azul deberá cuidar toda clase de detalles de Chivas, pues aunque apenas parece levantarse del fondo donde habita, se valdrán de todo contra todos en esta necesidad por rescatar a tiempo la franquicia.