Con ‘Ambriz’ de ser un grande
Su sonrisa lo delata. El mejor puesto de su carrera ha llegado sin tanta búsqueda. Ya una vez pasó por un grande como Chivas, pero ahora con dos años de contrato en Club América sin duda Ignacio Ambriz sabe que se sacó la lotería.
Sin títulos ganados, apenas dos liguillas en su historial en la Liga MX y con equipo de lujo a su alcance, Nacho le abrió las alas a la grandeza gracias al apoyo de su amigo Ricardo Peláez, quien este martes lo presentó como el nuevo entrenador azulcrema.
Rocío Cepeda
Su sonrisa lo delata. El mejor puesto de su carrera ha llegado sin tanta búsqueda. Ya una vez pasó por un grande como Chivas, pero ahora con dos años de contrato en Club América sin duda Ignacio Ambriz sabe que se sacó la lotería.
Sin títulos ganados, apenas dos liguillas en su historial en la Liga MX y con equipo de lujo a su alcance, Nacho le abrió las alas a la grandeza gracias al apoyo de su amigo Ricardo Peláez, quien este martes lo presentó como el nuevo entrenador azulcrema.
Tras el despido de dos técnicos ganadores y campeones como Antonio Mohamed y recientemente Gustavo Matosas, en América optaron por un estratega sin muchos reflectores pero con muchas ganas de lograr más de lo que ya han hecho.
“Esta oportunidad me la he ganando con base a trabajo. Agradezco a Ricardo la oportunidad que me está brindando”, fueron las palabras de Ambriz, quien puede contar que su mayor logro en un banquillo fue haber sido auxiliar de Javier Aguirre en España.
Nacho comenzó su carrera como entrenador en 2003 al dirigir al Puebla durante siete partidos. Terminó con saldo de dos triunfos, dos empates y tres derrotas. Después se fue a probar suerte al futbol español con el “Vasco”, donde pudo ser su asistente en el Osasuna de Pamplona y el Atlético de Madrid.
Al volver a México tomó las riendas del San Luis durante cuatro torneos, en los cuales solo calificó en uno.
Nunca se le caracterizó por brindar un futbol vistoso y ofensivo pero aún así llegó a Chivas, para luego ser parte de los Gallos Blancos del Querétaro.
“Me siento con la capacidad y la ilusión para salir campeón en el primer año. Pretendo un equipo con mucho equilibrio, con orden, que tenga posesión de balón y que sepa a qué juega”, prometió el nuevo timonel de los azulcrema.
Las mejores cartas de Ambriz se resumen en un máximo de 26 puntos, con Querétaro en Apertura 2013 y San Luis en Apertura 2010, los cuales fueron suficientes para disputar la Liguilla.
En ambos solo llegó hasta Cuartos de Final y lo eliminaron. Amarga experiencia, pero no tan adversa como su último torneo con Querétaro, en donde logró apenas un 24 por ciento de rendimiento que le valió para ser relevado por Víctor Manuel Vucetich, ahora finalista del Clausura 2015 y quien peleará por el primer campeonato para Gallos Blancos, ante Santos.
“Las críticas me fortalecen, a la afición le pido el beneficio de la duda, yo trabajaré mucho para hacer un equipo ganador.
“Yo intentaré adaptarme rápido a las grandes cosas que hay aquí y poco a poco implementaré mis conceptos” dijo Ambriz.
Además de llenarle el ojo a la afición, que se volcó en redes sociales para mostrar su descontento por la contratación, a Ignacio Ambriz le esperan otros grandes retos como técnico en el nido de Coapa.
De entrada deberá manejar un equipo que le van a armar, no un plantel que él haya escogido. La directiva le dará oportunidad para escoger uno o dos refuerzos, apostando a la continuidad del equipo que ya existe.
Con ese armado tendrá que hacer un papel decoroso en el próximo Mundial de Clubes Japón 2015, así como avanzar a fase de grupos en la Concacaf Liga Campeones 2015-2016.
“Cuando traje a (Miguel) Herrera no había ganado nada, hoy es técnico del Tri”, defendió Peláez la elección del DT.
Le guste o no a la afición, la realidad es que Ignacio Ambriz es el nuevo entrenador de las Águilas y lo único que deberán hacer es apoyarlo para que pueda concretar sus promesas.