El Monterrey de Antonio Mohamed despertó del letargo donde reposaba, pues a pesar de tener un torneo regular, la explosividad no había sido su mejor arma. Gustó, goleó y ganó contra León de forma oportuna, aunque Dorlan Pabón es quien sigue estando corto en sus actuaciones respecto a lo que se espera de su talento.
Si bien la noche del sábado en el estadio Tecnológico se despachó con dos goles en la apabullada de 5-1 que le recetaron a los Panzas Verdes, el colombiano también celebró haber cortado una sequía de siete juegos sin aparecer con los albiazules.
Tuvieron que pasar poco más de 600 minutos desde su último gol, el de la jornada 4 en el empate de 1-1 contra Veracruz, para que Pabón se volviera a hacer presente en el marcador de La Pandilla.
Este bálsamo para Dorlan, y para la afición que cada semana le demuestra esa paciencia para verlo reaccionar, le permite llegar a cuatro dianas en lo que va de la temporada, aunque lejos de la expectativa que se tiene de él.
La temporada pasada, hasta la misma jornada 11, el sudamericano ya tenía 10 anotaciones y finalizó la campaña regular con un total de 11 goles.
Lo positivo de su actuación la noche del sábado es que la confianza ha vuelto.
Rayados necesitan de su potencial goleador para sumar más puntos y más goles a favor con la esperanza de solo mirar hacia arriba para escalar más posiciones.