El juego que lleva a la felicidad

De la colonia Independencia, en Monterrey, pueden conocerse ciertas cosas. Es una de las más peligrosas de la ciudad, ya que durante décadas sufrió el olvido de las autoridades, lo que la convirtió en centro de operaciones del crimen organizado.

La “Indepe” mezcla una serie de detalles particulares. La música vallenata, sus bardas grafiteadas, el tráfico constante por sus estrechas calles y los grupos de pandillas que representan una amenaza para los vecinos y la niñez del sector.

Víctimas o victimarios

En México, los jóvenes representan el 38.2 por ciento de las víctimas de homicidios en la última década. Las adicciones, el vandalismo, el reclutamiento de grupos criminales y la violencia son los riesgos más grandes a los que se exponen por vivir en zonas de alta peligrosidad.

La violencia en esta colonia es un cáncer que se propaga, pero que sin duda puede encontrar su cura. Desde hace poco más de dos años, un grupo de exfutbolistas puso manos a la obra y pensó en dar solución a estos problemas.

Es así como nacen los Guerreros de la Independencia, un equipo de futbol americano que fundamentalmente consiste en un proyecto a favor de la juventud de tan peligrosa colonia.

“Ha sido una experiencia muy grata pero también muy fuerte. Hemos tenido casos de violencia familiar, deserción escolar, adicciones, que antes robaban, que se dedicaban al narcomenudeo, pero gracias a que tenemos personal capacitado, a todos se les está dando atención especializada e integral”, contó Mauricio Salinas, presidente del club deportivo.

Peligro en la zona, amenaza sus prácticas

Los Guerreros entrenan a diario en el Centro Comunitario Independencia, situado en el centro de la misma colonia. 

A veces, si la zona se pone complicada por la inseguridad que ahí se vive, algunos jugadores no acuden a entrenar y esto afecta en los objetivos de  ser el equipo competitivo que todos desean. 

Sin embargo, los entrenadores no dejan de acudir para que sus muchachos sigan confiando en la disciplina.

“Esta temporada terminamos con una marca totalmente negativa, perdimos todos nuestros juegos porque la situación en la zona otra ves se puso tensa, batallaban para venir a entrenar, pero tú puedes verlos que tienen muchas ganas de seguir adelante”, contó Óscar Morales, coach en jefe.

La visión de los Guerreros es convertirse en una organización líder, reconocida por su compromiso social con un modelo de apoyo exitoso a jóvenes en situación de vulnerabilidad, mediante el deporte, la formación humana y el servicio comunitario.

“Actitud, es lo que hacen estos chavos día con día. Vienen, entrenan todos los días, juegan el sábado, terminan golpeados y con un marcador de 36-0, y el lunes otra vez los vuelves a ver con ánimo.

El grupo tiene tres temporadas dentro de la Monterrey Football League (MFL), la principal liga de futbol americano infantil en el Estado de Nuevo León. Los rivales los han recibido muy bien, tanto que han fomentado la combinación del lunch al final del partido con otros clubes de nivel social medio alto.

“Los rivales pensaron en un principio que los muchachos (Guerreros) iban a ser rijosos, pelenoneros, pero nunca pasó, han aceptado muy bien la disciplina que todo ha sido muy positivo”, dijo Morales. 

La educación deportiva, compromiso social y desarrollo integral que reciben estos chicos en el equipo va dando muestras del crecimiento que brinda el futbol americano en esta colonia.

Tienen su himno

José Alfredo Rangel, fullback, con una temporada en Guerreros, creó un rap para el equipo.

“A mi me gusta mucho el rap y por eso decidí en mi computadora crear el himno de los Guerreros. Ojalá pronto pueda grabarlo en un estudio”, contó el “Raper”.