Jugar de rojo y con una formación de 4-3-3, aumentaría las posibilidades de que Inglaterra se corone campeón del mundo en Brasil.
Al menos así lo definió el reconocido científico Stephen Hawking, quien para llegar a esta conclusión estudió variables medioambientales, psicológicas, políticas y tácticas que influirán en el conjunto inglés que dirige Roy Hodgson.
Cuando Inglaterra se coronó campeona en 1966, jugó vestida de rojo. Esta es una razón más por la que el científico apoya que se use este color.
“Vestir de rojo hace sentir a los equipos más seguros y hace que sean percibidos como más agresivos y dominantes”, dijo Hawking.
A Inglaterra también le ayudará si cambia su formación, ya que estadísticamente el conjunto inglés tiene más éxito cuando juega 4-3-3 que cuando usa el 4-4-2.
Hawking reconoció que al llamado “Equipo de la Rosa” no le ayuda mucho jugar en climas como el que se topará en Brasil este verano.
El penalti perfecto
Hawking también dio la fórmula para el penalti perfecto.
“Se tiene que tirar a los ángulos altos. El 84 por ciento de los penales lanzados ahí entran. Deben cobrarse con la parte interna del pie y con velocidad, aunque esta última no es nada sin colocación”, indicó.