En el último partido de la temporada como locales, las Chivas pudieron regresar a la victoria al vencer con la mínima diferencia al también sotanero, Pumas. Pero en el Omnilife, no todo fue felicidad.
Ni el gol de Rafael Márquez Lugo ni los tres puntos que sumaron, para llegar a 12 unidades, fueron suficiente para el ánimo de los aficionados que se dieron cita en el estadio rojiblanco, pues sobre el final del duelo desplegaron cuatro mantas amenazantes.
Con las leyendas: “Se acabó la paciencia”, “Ya Lárgate Vergara”, “Con la historia no se juega” y “Se van o mueren”, un grupo de personas hizo público su descontento contra el club Guadalajara debido a la pésima temporada que tuvo el equipo, la cual incluso los involucrará en el tema del descenso en las próximas temporadas.
Después de esta manifestación pacífica en el estadio Omnilife, se reportaron incidentes de los aficionados con los cuerpos de seguridad del inmueble.
Y es que ni los refuerzos ni el cambio de técnico fueron decisiones trascendentales en el Rebaño Sagrado en la temporada que está por terminar.
Pumas, con este resultado en contra, se quedó en la décimoséptima posición de la tabla general con 10 puntos, de 48 posibles, lo que les brinda el peor torneo de su historia al quedar sin posibilidades de superar los 14 puntos que sumaron en el Clausura 2005.